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Actualizado: 18 mar 2018 / 20:04 h.
  • El presidente Donald Trump, durante un acto en febrero pasado. / Efe
    El presidente Donald Trump, durante un acto en febrero pasado. / Efe

El presidente estadounidense, Donald Trump, acusó ayer de tener un sesgo demócrata al equipo del fiscal especial que investiga la supuesta injerencia rusa en las elecciones de 2016, Robert Mueller, en un nuevo ataque a esa pesquisa que afecta a varias figuras próximas al mandatario.

«¿Por qué el equipo de Mueller tiene 13 demócratas de línea dura, algunos de ellos grandes simpatizantes de la corrupta Hillary (Clinton), y cero republicanos? Hace poco añadieron a otro demócrata... ¿Alguien cree que esto es justo? Y sin embargo, ¡NO HUBO CONSPIRACIÓN (con Rusia)!», escribió Trump en Twitter, que es su gran ventana al mundo.

Trump omitió que el propio Mueller es republicano, y que fue nominado en 2001 como director del Buró Federal de Investigaciones (FBI) por un presidente de ese partido, George W. Bush.

El mensaje de Trump llegó un día después de que su abogado personal, John Dowd, pidiera que el Departamento de Justicia cierre la investigación de Mueller, por considerar que esa pesquisa fue «manufacturada» por el exdirector del FBI James Comey en base a un dossier «fraudulento y corrupto» sobre Trump y Rusia.

Mueller, que retomó la indagación después de que Trump despidiera el año pasado a Comey, lleva meses investigando la posible interferencia rusa en los comicios que dieron la victoria al ahora presidente, y para ello ha interrogado a miembros del equipo de la campaña electoral del gobernante y a altos funcionarios.

El fiscal especial quiere interrogar también a Trump, y sus abogados llevan al menos dos meses en conversaciones con su equipo para negociar una fecha y un formato.

En ese contexto, los tuits de Trump revelan su impaciencia respecto a la pesquisa de Mueller, con la que hasta ahora la Casa Blanca había asegurado que estaba dispuesto a cooperar.

Trump también continuó ayer sus críticas a Andrew McCabe, que hasta enero era el número dos del FBI y que tenía previsto retirarse de la agencia ayer, pero fue cesado el viernes acusado de haber hecho «una filtración no autorizada a un medio de comunicación».