Megáfonos y luminarias como opción para una Semana Santa segura

El Cecop estudiará en septiembre medidas, aunque ya hay algunas sobre la mesa

Iñaki Alonso @alonsopons /
15 jul 2017 / 09:04 h - Actualizado: 15 jul 2017 / 10:39 h.
"Madrugá","Sucesos de la Madrugá 2017"
  • Uno de los tensos momentos de la Madrugá de este año. / Manuel Gómez
    Uno de los tensos momentos de la Madrugá de este año. / Manuel Gómez
  • Las autoridades en una reunión previa con el Consejo y los hermanos mayores de la Madrugá.
    Las autoridades en una reunión previa con el Consejo y los hermanos mayores de la Madrugá.

La búsqueda para recuperar el esplendor –y la seguridad– a la Semana Santa de cara a 2018 se afrontará en septiembre. Así lo comunicaron tanto el alcalde, Juan Espadas, como el presidente del Consejo de Cofradías, Joaquín Sainz de la Maza, que dejó claro que el cometido recae sobre los hombros, principalmente del Consistorio. «La primera parte, la de la investigación, ya ha dado un primer avance los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado; para las medidas estará el Cecop, con el que trabajará el consejo», indicó Sainz de la Maza.

La operación de lavado de imagen de la Madrugá se acometerá en septiembre. Y, aunque todo se someterá a evaluación, ya se han empezado a sondear medidas para blindar a las cofradías y al público asistente de las temidas y ya recurrentes carreritas. El punto de partida será el de «más pedagogía, más información y más iluminación», según indicaron.

Entre la terna de medidas, se plantea la colocación de megafonía, en especial en las 17 zonas consideradas como críticas. Esta se usaría exclusivamente para que los agentes informen con claridad de todo suceso y acabar con especulaciones como las que se multiplicaron, de inicio, en la Madrugá de 2017. A más información, menos posibilidad de pánico.

Otra medida barajada es la de contar con iluminación en zonas críticas. No sería tanto para su uso durante toda la noche, sino cuando se origine algún incidente. «En la Feria se producen peleas y no hay avalanchas porque la gente ve claramente lo que está ocurriendo», explican las fuentes consultadas por este periódico. No obstante, las luminarias especiales tienen como hándicap su elevado coste, además del malestar que puede generar en cofradías, como El Gran Poder, El Calvario o El Silencio, cuyo itinerario se vincula al recogimiento más absoluto.

La tercera pata que se plantea es la de rebajar la onda sonora que ha sido, según la investigación iniciada hace tres meses, la causa de los sucesos de la Madrugá. Para ello, habría que retirar aquel mobiliario que, en su movimiento, pudiera resultar más ruidoso, como retirar las vallas de hierro por las de plástico o pensar la conveniencia de usar otro tipo de sillas para la carrera oficial. Todo ello planteamientos que se encuentran en la fase de lluvia de ideas y que se expondrán en la reunión del próximo mes de septiembre.

En ella, incluso se sopesa impartir cursos on line a los nazarenos –sólo en la Madrugá son 18.000– para que sepan actuar ante estas circunstancias excepcionales. Así, ponen como ejemplo a El Silencio, cuyo cortejo se replegó al paso de la estampida por Cuna, con lo que evitaron males mayores.