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Blanca Rodríguez, directora del curso, junto a la exministra Carmen Alborch. / El Correo
La escritora y exministra de Cultura Carmen Alborch destacó ayer la importancia de la educación en igualdad desde las escuelas, aunque reconoció que «hacen falta muchos esfuerzos y un compromiso muy fuerte, que no sea una cuestión puntual, sino que impregne en la sociedad de verdad». En este sentido, añadió que los valores transmitidos en las familias también «suponen un factor importante a la hora de educar en igualdad».
Alborch participó en el seminario La Ley de Igualdad, diez años después. Conquistas, retrocesos y luchas por venir en el marco de los cursos de verano de la UPO en Carmona, donde analizó los efectos de esta ley cuyo objetivo «es fomentar la construcción de una sociedad formalmente igualitaria entre hombres y mujeres».
En primer lugar, Alborch criticó el discurso de algunos medios televisivos, ya que indicó que «los públicos tienen la responsabilidad, según la ley, de transmitir esos valores de igualdad y todavía tienen carencias» mientras que los privados «transmiten desigualdad y misoginia», al punto que ha señalado que «en algunos programas de televisión se denigra a la mujer hasta los extremos» con situaciones que «perpetúan los roles de género».
La igualdad en la cultura
Respecto al mundo de la cultura, donde la escritora ha desarrollado su trayectoria política y profesional, explicó que, aunque todavía existe mucha desigualdad, cada vez hay más visibilidad.
«Vemos a muchas directoras de cine muy talentosas que son muy poco conocidas. Antes se pensaba que las mujeres no tenían capacidad para crear por una cuestión de hormonas, no se trata de eso, el conocimiento no tiene género», defendió antes de criticar la composición de las Reales Academias, en las que «aún siendo la mitad de la población, no estamos representadas de forma equilibrada».
En lo relativo al ámbito político, Alborch diferenció las medidas tomadas por el PSOE en materia de igualdad respecto a la de otros partidos políticos: «No es que barra para casa pero, durante los años de Gobierno de Zapatero, fue cuando se aprobaron la Ley Orgánica Integral de Igualdad Efectiva, la Ley contra la Violencia de Género y la Ley de Salud Reproductiva». En consecuencia, afirmó que «no se puede comparar esta labor con la de otros gobiernos conservadores que se dedican a frenar la libertad de las mujeres».