Investigado por maltrato animal al dueño de dos cachorros de galgo

Los animales, de 3 y 4 meses, estaban completamente invadidos por parásitos, garrapatas y pulgas. Uno de ellos murió a las 36 horas del ingreso en la clínica veterinaria

22 jul 2017 / 11:22 h - Actualizado: 22 jul 2017 / 11:35 h.
"Maltrato animal"
  • Imagen de uno de los cachorros de galgo. / Guardia Civil
    Imagen de uno de los cachorros de galgo. / Guardia Civil

La Guardia Civil de Écija investiga a M.P.L. como presunto autor de un delito relativo a la Protección de la Flora y Fauna y Animales Domésticos.

La Patrulla del SEPRONA de Écija se encontraba realizando una inspeccion por la zona de un polígono industrial del término municipal y observó una perrera con 9 perros de diferentes razas y sexos rodeados de basura como cristales, plásticos, restos orgánicos etc... también agujeros creados por ratas. Por todo esto se decidió investigar para localizar al dueño o responsable.

Una vez que los agentes localizaron al dueño, M.P.L. regresaron al lugar y comprobaron que en la perrera solo quedaban dos animales. Al entrevistarse con el dueño, éste argumentó “que algunos de los perros que faltaban habrían muerto y otros supone que se los ha llevado alguien, que no lo sabe con seguridad porque ha estado enfermo”. Al inspeccionar la perrera, se certifica que existen dos galgos en pésimas condiciones higiénicosanitarias. Se trata de un macho y una hembra de entre 3 y 4 meses. El macho carece del microchip preceptivo, cartilla sanitaria etc... el otro es una galga de cuatro meses, con microchip. Ambos tienen sus cuerpos invadidos por parásitos, garrapatas y pulgas. El estado en que se encuentran es tal, que los guardias civiles suponen que puede peligrar la vida de los cachorros y rápidamente avisan a un facultativo veterinario.

Los animales fueron tratados por el veterinario, quien les administró protectores gástricos, antibióticos, antiinflamatorios, analgésicos e incluso hubo que realizarles transfusiones sanguíneas por la anemia que presentaban. Se le practicaron diversos test por si las garrapatas hubiesen transmitido alguna enfermedad por Leishmania, Ehrlichia y Borrelia (microbios transmitidos por picaduras de garrapatas), dando como resultado positivo en Ehrichia y Borrelia.

Es de reseñar, que uno de los perros falleció a las 36 horas del ingreso en la clínica veterinaria.