Bolardos móviles para que Betis y Mateos Gago sean peatonales

El Ayuntamiento pretende aplicar esta fórmula para limitar el tráfico de estas calles a residentes

Iñaki Alonso @alonsopons /
14 dic 2017 / 06:49 h - Actualizado: 13 dic 2017 / 23:28 h.
"Movilidad"
  • Dos turistas pasean por la calle Betis, que el gobierno local confía restringir al tráfico privado a lo largo del próximo año 2018. / Jesús Barrera
    Dos turistas pasean por la calle Betis, que el gobierno local confía restringir al tráfico privado a lo largo del próximo año 2018. / Jesús Barrera

Unos bolardos móviles serán la solución definitiva para que las calles Mateos Gago y Betis ganen espacio al peatón. La Delegación de Movilidad se ha decantado por esta fórmula para poder limitar el tráfico de vehículos y, a su vez, facilitar el acceso a residentes y clientes de hoteles. Una medida que, por cierto, se lleva aplicando desde hace años en Córdoba, cuyo casco urbano está limitado al vehículo privado a través de este dispositivo de pilonas.

Esta fórmula se lleva mascullando desde que se retomó el debate sobre la peatonalización de Betis y se planteara la fórmula para acabar con «el caos» –sobre todo de carga y descarga– de Mateos. La medida se ha madurado y, de hecho, se quiere implantar a lo largo del próximo año. Así, se colocarán estas pilonas móviles, que funcionarán con elementos automáticos para el control de acceso a residentes, a través de tarjetas y lectores de matrículas. De forma paralela, se prevé fijar también un control manual, que sería controlado a través del Centro de Gestión de la Movilidad ubicado en La Ranilla, que contará con un operador las 24 horas del día para atender a los conductores que pretendan acceder a estas dos calles sin dispositivo. La inversión prevista no se limita exclusivamente a la instalación de estos bolardos en los accesos a las vías, sino también para la adquisición del soporte tecnológico (softwares y hardwares) que permita su funcionamiento.

La ubicación exacta de estos elementos todavía no ha trascendido, pero a la vista de los ensayos realizados en las calles, lo lógico es que se instale junto al acceso al aparcamiento de la Plaza del Altozano en Betis. En el caso de Mateos Gago, todo quedaría a la espera de cómo funciona el experimento que se acometerá en la vía desde el viernes y durante el periodo navideño.

«La reordenación de la calle es un objetivo claro del gobierno y vamos a empezar a aplicar las medidas esta Navidad para realizar una evaluación que será determinante en las medidas que adoptemos a partir de 2018», explicó recientemente el delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera, durante la presentación del plan de tráfico diseñado para Navidad.

El cierre al tráfico privado de Mateos Gago con motivo del citado plan fija como punto de control –y por tanto, susceptible de contar con pivotes– la calle Águilas, de forma que desde allí sólo se autorizará el acceso a residentes y vehículos autorizados de diez de la mañana a diez de la noche. Además, la carga y descarga se limitará su acceso hasta las diez de la mañana, teniendo una hora de margen para salir de la vía. La prueba también eliminará los estacionamientos y las paradas de taxis de Mateos Gago, que es el objetivo último en el que están trabajando en los últimos meses el gobierno del socialista Juan Espadas.

La opción de colocar pilonas para limitar el tráfico se ha extendido estos meses en toda España, ya no tanto para abrir espacios para el peatón, sino por motivos de seguridad a raíz de los atentados de Barcelona. El caso más cercano es el de Granada, que a final de verano extendió este sistema, que se aplicaba sólo de mañana, las 24 horas en zonas del barrio histórico. Con ello, seguía la recomendación de la Policía Local para evitar la entrada de camiones. Su puesta en servicio sacó a la luz, de hecho, uno de los hándicaps del sistema: el riesgo de siniestralidad entre los infractores. En las primeras dos semanas, se contabilizaron un total de 25 accidentes.