Hoy se ha presentado el informe anual de Cáritas Diocesana de Sevilla de 2018 que desvela que 43.467 personas se beneficiaron de la atención de la iglesia. Para ello, la Iglesia invirtió 8.712.149 euros en diversos servicios y proyectos.
Mariano Pérez de Ayala, director de Cáritas de Sevilla, ha explicado algunos de los problemas a los que se enfrenta la sociedad, como por ejemplo, el 14 por ciento de los empleados que viven en exclusión social, la tasa de desempleo que tiene Sevilla o la dificultad para acceder a la vivienda.
Sobre la vivienda, Pérez de Ayala advirtió que el 11 por ciento de los ayudados por Cáritas, cuando pagan el alquiler o la hipoteca se ven obligados a acudir a la Iglesia para recibir ayuda.
El 77 por ciento de las ayudas en atención primaria la acaparan la alimentación y recursos básicos, y la vivienda.
PROMOCIÓN DE LA PERSONA
Cáritas trabaja en 10 programas de atención especializada en los que han participado 3.479 personas. Algunos de esos programas ayudan a personas sin hogar, mayores, mujeres y migrantes.
El ente de la Iglesia ha reclamado a la Administración Pública que cumpla con su responsabilidad ofreciendo unos servicios sociales que protejan a las personas.
Por último, Cáritas ha mostrado su preocupación por la pobreza que sufren algunos de los barrios de Sevilla. Seis de los 15 más pobres se encuentran en nuestra ciudad. La Iglesia ha advertido de que no se puede naturalizar y ha recordad que la pobreza se hereda.