Denuncian el abandono de las pistas de Macarena-Tres Huertas

Los vecinos critican la dejadez municipal en estos dos años de quejas. Avisan del «problema de insalubridad» con la acumulación de basura en los vestuarios

Manuel J. Fernández M_J_Fernandez /
23 nov 2017 / 06:57 h - Actualizado: 23 nov 2017 / 09:34 h.
"Distrito Macarena"
  • Estructura de uno de los colchones que ardieron recientemente en el edificio de las antiguas pistas deportivas, con vallas rotas y puertas reventadas. / Fotos: El Correo
    Estructura de uno de los colchones que ardieron recientemente en el edificio de las antiguas pistas deportivas, con vallas rotas y puertas reventadas. / Fotos: El Correo
  • Colchones, excrementos y todo tipo de basura en los vestuarios. / El Correo
    Colchones, excrementos y todo tipo de basura en los vestuarios. / El Correo
  • Denuncian el abandono de las pistas de Macarena-Tres Huertas
  • Denuncian el abandono de las pistas de Macarena-Tres Huertas

Los vecinos de Macarena-Tres Huertas están desesperados. Desde hace dos años vienen denunciando «la situación total de abandono» de las antiguas pistas deportivas del Instituto Municipal de Deportes (IMD) que se encuentran dentro de esta reurbanización residencial en la frontera de la avenida José Díaz con Torneo, en el distrito Macarena. «Son continuamente ocupadas por indigentes. Los vestuarios están llenos de suciedad, con colchones, mantas, excrementos y todo tipo de basura. Hay incluso riesgo de caída de los póster de luz», alertan los vecinos afectados que exigen al Ayuntamiento una limpieza, mantenimiento y control de estas instalaciones.

En uno de los escritos presentados al distrito por parte de la Mancomunidad de Propietarios Macarena-Tres Huertas se manifiesta la preocupación vecinal por «este foco de insalubridad» que tienen a escasos metros de las viviendas. Así, indican que actualmente se viene haciendo un mal uso de las pistas deportivas y, sobre todo, del edificio de los vestuarios, donde se acumula todo tipo de suciedad al servir de refugio para los sin techo. «Esto es peor que las Tres Mil Viviendas. El otro día hubo un incendio porque uno le metió fuego a unos colchones. No es solo una cuestión de estética sino de salubridad y seguridad ciudadana», aseguran los residentes que inciden en «la falta de decoro del Ayuntamiento, dejando de la mano este patrimonio municipal». «Han reventado las puertas de acceso a los vestuarios, y la gente entra y sale con plena libertad», recogen en uno de los escritos de denuncia, en el que además advierten que los inquilinos «derrochan luz y agua, dejando los grifos abiertos y las luces encendidas durante el día y la noche».

De igual manera, alertan de que la falta de control y vigilancia del recinto propicia que, cualquier día de la semana, grupos de jóvenes se saltan «lo que ha quedado de valla» y acceden al interior de las pistas «jugando a futbito hasta altas horas de la madrugada, montando allí su botellona y molestando con la música y ruidos a los vecinos de los bloques de pisos colindantes».

En este sentido, exponen que algunos vecinos han llegado a llamar a la Policía Local y Nacional denunciando estos hechos y el vandalismo que está lapidando poco a poco el recinto y para que «se tomen medidas oportunas que al respecto se estimen necesarias».

Los representantes de la Mancomunidad de Propietarios Macarena-Tres Huertas aclaran además que «el mantenimiento, vigilancia, buen uso y responsabilidad» de esta antigua pista de jockey que hace unos años usaba el club deportivo Patín Macarena, «corresponde en principio al Instituto Municipal de Deportes (IMD)». Sin embargo, en un escrito de respuesta a las críticas vecinales, con fecha 11 de febrero de 2016, se aseguraba que la parcela de la discordia «no se encuentra actualmente adscrita al IMD», por lo que informaba del «traslado de la incidencia a la junta municipal de distrito Macarena para que se arbitren las medidas oportunas encaminadas a subsanar las alteraciones aludidas».

Precisamente, meses después, en verano del año pasado, los representantes vecinales afirman que mantuvieron un encuentro con la delegada del distrito para pedirle que tomara cartas en el asunto y, entre otras cosas, procediera a la limpieza y corte de los suministros de luz y agua. «Nos dijo que ahoramismo, pero no vimos cambios». Acto seguido mantuvieron otro encuentro con el director del distrito, en el que «durante tres semanas se vio limpieza y vigilancia, pero que, a la cuarta, volvió todo a ser igual». Lamentan «esta connivencia del Ayuntamiento» y proponen que se le de algún uso para acabar con la situación. Una de las opciones vecinales es «ceder el terreno como zona de aparcamiento en superficie».