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La recogida de basura individual se ha implantado, con mayor o menor controversia, en distintas zonas del centro en los últimos años. / El Correo
Los vecinos de San Lorenzo plantan cara al sistema de recogida de basura individual que trata de implantar el Ayuntamiento en el barrio siguiendo la tónica de otros puntos del Casco Histórico para evitar malos olores y reducir el impacto visual. La asociación de vecinos Casco Histórico-San Lorenzo ha iniciado una campaña de recogida de firmas para buscar alternativas a los cubos individuales que, aseguran, son «incompatibles» con el espacio de algunas viviendas y la avanzada edad de muchos de los residentes.
«Es una medida que ha tomado Lipasam con el distrito sin contar con los vecinos. Ya dijimos que no en la reunión en la que se nos informó», insiste la responsable vecinal de San Lorenzo, Ana Sosbilla, que esta semana ha mostrado el «malestar vecinal» en la sesión ordinaria de la junta municipal del distrito. Sosbilla reconoce que, si bien todo empezó «con la recogida de 46 firmas de vecinos de la calle Teodosio», donde se habían acumulado varios contenedores en un mismo punto, «ello no quiere decir que se haya consensuado con los vecinos del total de calles que finalmente se han visto afectados». Y es que relatan que pese a su negativa expresa en la reunión, hace unas semanas se procedió a retirar los contenedores de Teodosio y también de otras calles, «que no tenían consenso vecinal», como la Gavidia, Santa Ana, Teodosio, Baños y plaza Doña Teresa Enríquez. «De la noche a la mañana, los vecinos se han visto sin un lugar donde depositar la bolsa de basura. Tienen que recorrer, andar, al menos 700 metros más hasta el punto más cercano».
Los vecinos explican que muchos se han negado a recibir los cubos individuales en casa por diversos motivos. «En su mayoría, son personas mayores con una edad media de 65 años y no pueden tener en sus hogares un cubo individual porque no tienen a nadie que lo pueda subir o bajar, ni tampoco tienen ascensores ni hueco en el portal para tenerlo». A ello, recuerdan, se suman los problemas de salubridad y «malos olores que supone tener la basura acumulada dentro de la propia casa».
Como consecuencia de esta «improvisación», los vecinos alertan de que «las papeleras o los alcorques del barrio amanecen llenos de basura y, por tanto, se da el caso de que hay zonas por las que no se puede pasar debido al olor nauseabundo que se produce ahora con el calor». Su propuesta, como han explicado este martes al propio delegado del distrito Casco-Antiguo, Juan Carlos Cabrera, es que «se dialogue y se busquen alternativas con los vecinos, con todos los afectados y no unos cuantos». Entre las alternativas que ponen sobre la mesa están seguir el modelo de recogida de basura con puntos selectivos y una hora concreta para tirar la bolsa, como el que actualmente hay en Santa Cruz. «Se podrían ubicar contenedores que no molesten y establecer unos horarios. Es algo que también se está dando en Cádiz o Bruselas, donde se recoge la basura tres veces a la semana».
El PP presentó en la junta municipal una propuesta sobre esta queja vecinal, que quedó aprobada por unanimidad y por la que el distrito se comprometió a reunirse en septiembre con los vecinos. Eso sí, mientras, el Ayuntamniento defiende que «Lipasam ha llevado a cabo su protocolo de actuaciones y campaña informativa, puerta a puerta, en Teodosio, Baños y Gavidia», y que hay «puntos alternativos para depositar la basura quienes no quieren cubos individuales».