Sevilla contará con 9.000 habitantes más a partir de 2021

El desarrollo del proyecto Palmas Altas Sur albergará la construcción de más de 2.800 viviendas, 1.232 de ellas en régimen de protección oficial

Manuel Pérez manpercor2 /
07 jun 2018 / 13:03 h - Actualizado: 07 jun 2018 / 13:05 h.
"Metro de Sevilla","Urbanismo","Demografía","Juan Espadas","Antonio Muñoz"
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Sevilla podría contar con unos 9.000 habitantes más al sur de la ciudad. El proyecto Palmas Altas Sur, que incluye la edificación de 2.870 viviendas, pretende «consolidar e incrementar la población» de la capital hispalense, según explicó el consejero delegado de Metrovacesa, Jorge Pérez de Leza, que este jueves firmó un convenio de desarrollo con el alcalde de Sevilla, Juan Espadas.

El convenio permitirá al Ayuntamiento disponer de una parcela propia en la futura urbanización, en la que, además, promocionará un total de 1.232 viviendas de protección oficial. Según Pérez de Leza, la promotora prevé poner en marcha la primera fase del proyecto «lo antes posible» y estimó que la entrega del primer paquete de viviendas podría producirse a finales del año 2021. La inversión superará los 400 millones de euros y según fuentes de Metrovacesa, el inicio de obras de urbanización e infraestructuras está previsto para principios de 2019, mientras que las primeras obras de edificación tendrán lugar en otoño del mismo año.

Se trata de un complejo urbanístico de más de 67 hectáreas situado junto al río Guadaíra y el Cortijo del Cuarto. El regidor hispalense destacó que se convertirá en una «nueva centralidad» de la ciudad, ya que servirá de empuje al futuro centro comercial de Palmas Altas. En este sentido, Pérez de Leza afirmó que el proyecto aspira a ser un «foco de empleo y prosperidad».

«Si Sevilla quiere crecer en población, necesita habilitar vivienda», afirmó con rotundidad el delegado municipal de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo , Antonio Muñoz, quien defendió que el hecho de «que Sevilla crezca demográficamente significa que tenga desarrollos urbanísticos» como el de Palmas Altas Sur, el cual «permite que Sevilla crezca desde el punto de vista urbanístico y demográfico», señaló Muñoz.

Un proyecto que se suma a otros ya en alto grado de ejecución como el de Hacienda Rosario en Torreblanca u otros que se pondrán en marcha en los próximos meses como es el caso de los solares de La Florida, Cisneo Alto o la Barqueta. De esta manera, el alcalde defendió la labor del Ayuntamiento al respecto: «Con estos proyectos, Sevilla vuelve a recuperar preeminencia en el desarrollo metropolitano», aseguró Espadas.

Un desarrollo que ahora pone el ojo sobre la línea 3 del metro, que es la que uniría Pino Montano con Bellavista y que ahora ve en Palmas Altas Sur un «núcleo importante de demanda» según Espadas. Y es que el proyecto urbanístico plantea como requisito primero actuar en las conexiones de la zona. De esta manera, se habilitará una rotonda en el sector norte que conectará con la SE-30 a través de la glorieta de la Avenida de las Razas y otra al sur que servirá de enlace con Bellavista a través del Cortijo del Cuarto. Así se crea un eje que, sumado al acceso especial al centro comercial de Palmas Altas, soluciona, a priori, el aumento exponencial del tráfico que se prevé.

El convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Sevilla y Metrovacesa viene a poner punto y final a una larga etapa de desencuentros entre ambas entidades. Todo comenzó hace unos doce años, cuando Metrovacesa adquirió los terrenos, calificados como urbanizables de uso residencial según el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de 2006. No obstante, la crisis de 2008 ralentizó toda opción de desarrollo urbanístico, a pesar de que el Ayuntamiento intentó poner en marcha el proyecto con una colaboración cercana a los 23 millones de euros. Sin embargo, el Gobierno de Juan Ignacio Zoido acusó a Metrovacesa de incumplimientos del convenio y publicó una resolución contra la constructora en 2015, paralizando así de manera definitiva unas obras que comenzaron en 2011 y que ya se bloquearon en diciembre de 2012, por lo que la promotora decidió acudir a los tribunales, reclamando una cuantiosa cantidad al Ayuntamiento. Con este acuerdo se desbloquea el futuro de unos suelos que vienen a consolidar una zona en pleno crecimiento y expansión.