El proyecto que tiene sobre la mesa el consejo de administración del Real Betis, condicionado siempre al ascenso del equipo a Primera división, contempla la construcción de un piso de plaza rectangular una vez que se haya bajado la cota del terreno de juego del Benito Villamarín 1,5 metros, según ha confirmado El Correo. Por lo tanto, una de las premisas para que las figuras del toreo se anuncien en el Benito Villamarín es que el festejo no se celebre en una plaza de toros portátil, de ahí que sea necesaria la construcción de un piso de plaza en perfecto estado para que se celebre el festejo y todos los elementos necesarios para el normal desarrollo de la lidia (callejón, chiqueros, patio de caballos, etc.).
El proyecto contempla que el ruedo se habilite en la zona del terreno de juego más cercada a Gol Norte, y tendría unas dimensiones aproximadas de 35 metros de ancho por 70 de largo (el actual ancho del campo verdiblanco). La ubicación en esta zona atiende a razones de aforo, ya que se aprovecharía buena parte del actual graderío verdiblanco. De esta manera, en caso de que este proyecto se ejecute, se podrían vender localidades en las gradas de Preferencia, Gol Norte y Fondo. En la zona que quedaría abierta se levantaría una grada supletoria similar a las que se construyeron para las finales de la Copa Davis que se disputaron en Sevilla. El objetivo de los promotores de esta idea es levantar una plaza de toros, aunque sea efímera, que tenga capacidad para alrededor de 45.000 espectadores, una cifra que superaría la capacidad de plaza de toros de la México (la mayor del mundo), que tiene capacidad para 41.000 espectadores