TRAS LA SUSPENSIÓN DE CONCIERTOS

El Real Madrid baja el volumen de la megafonía del Bernabéu en el estreno en Champions

El club blanco aplicó una reducción del ruido tras la suspensión de los conciertos que afectó tanto a las presentaciones como a las inserciones publicitarias

Los jugadores del Real Madrid celebran el gol de Antonio Rüdiger ante el Stuttgart.

Los jugadores del Real Madrid celebran el gol de Antonio Rüdiger ante el Stuttgart.

Denís Iglesias

"Hoy el sonido ha estado muy bajo. No han puesto ni el himno al final", comentaban los aficionados del Real Madrid a la salida del estreno del club blanco en Champions frente al Stuttgart. La percepción era generalizada en la hinchada de Chamartín, que comentó la situación en redes sociales. Desde la zona de prensa del Bernabéu, la sensación se repitió. Tan solo la presentación de los jugadores y el gol final de Endrick igualaron el tono que tiene un partido de Copa de Europa en este feudo.

El primer partido tras la suspensión de conciertos

La medida aplicada por el club llega después del varapalo que ha supuesto la suspensión de todos los conciertos agendados en el Bernabéu hasta, al menos, marzo de 2025. La entidad que preside Florentino Pérez decidió cancelar de forma temporal los eventos musicales en su reformado coliseo, después de las quejas de los vecinos por los elevados niveles de ruido de estos eventos. La medida afecta a actuaciones agendadas como las de Dellafuente, Aitana o Lola Índigo.

La magistrada del juzgado de instrucción número 54, Mónica Aguirre de la Cuesta, admitió a trámite, por un delito medioambiental, la denuncia interpuesta por la Asociación de Vecinos Afectados por el Bernabéu. En octubre se celebrará la vista. En el auto se expone que los espectáculos organizados "implican el incumplimiento de la licencia urbanística que obliga a adoptar medidas de insonorización". Igualmente, se considera que el propietario del estadio no realizó estudios para prevenir la difusión de ruidos.

Algunas de las canciones que sonaron en los prolegómenos y en el descanso del partido contra el Stuttgart, fueron de artistas como Aitana, que ha sufrido la cancelación de sus conciertos. Oficialmente, el Real Madrid se ha limitado a comunicar que ha reprogramado de modo provisional su agenda de eventos y conciertos. "Esta decisión forma parte del conjunto de medidas que viene tomando el club para que durante los conciertos se verifique el estricto cumplimiento de la normativa municipal vigente", explicó la entidad.

"Goles, sí; decibelios, no"

El ruido que generan los partidos de fútbol en el Bernabéu no está entre las quejas de las asociaciones vecinales que han protestado contra el uso del feudo madrileño como lugar de conciertos. De hecho, el lema 'Goles, sí; decibelios, no', ha sido recurrente en las publicaciones de cuentas como 'Ruido Bernabéu' que han documentado lo que consideran como "excesos en un 'eventódromo', porque nosotros vinimos a vivir junto a un estadio de fútbol, con 25 partidos al año".

La Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica y Térmica de Madrid fija en 55 decibelios el límite establecido antes de las 23:00 horas, cuando terminó el partido de Champions, y desciende a 45 a partir de ese límite horario. Esta temporada se han programado para Primera División encuentros en las primeras jornadas que han empezado a las 21:30 y que, por lo tanto, se han prolongado hasta las 23:30. Fue el caso del Real Madrid - Betis de la cuarta tirada del campeonato de Liga.

Nueva licencia o insonorización del Bernabéu

"A pesar de las condiciones de insonorización del estadio Santiago Bernabéu y de las medidas de refuerzo que se vienen acometiendo, el cumplimiento de dicha normativa por parte de los distintos organizadores y promotores se ha visto afectado por el gran desafío que les ha supuesto a los mismos tener en cuenta todos sus preceptos", aseguró el Real Madrid en su comunicado oficial.

¿Cómo podría resolver el vigente campeón de Champions y Liga el problema del ruido? Hay dos frentes abiertos: por un lado, negociar una licencia que autorice a que el Bernabéu sea un lugar para todo tipo de eventos y no un recinto en el que se celebran partidos de fútbol, además de esporádicos conciertos. Por otro, está la vía de la insonorización, que pasaría por instalar un escudo acústico, pero que en todo momento debería estar acompañado por la bajada del volumen de los altavoces.

Las peculiaridades del diseño laminado del Bernabéu, pensado para mejorar la ventilación, acotan el margen de maniobra. Pero el cerco mayor es inamovible y son los edificios cercanos a un estadio con un enclave único en Europa, en el corazón de una gran capital. Una ubicación tan privilegiada como limitante para convertirse en un lugar multiusos.