EL SENADO EVITA QUE SE VOTE HOY

Bolaños confirma a Gamarra que no retirarán la reforma legal sobre los etarras y afea al PP su "cambio de opinión"

El ministro de Justicia le pregunta a la número dos del PP por qué no presentó enmiendas y apoyó la ley mientras que Gamarra insiste en el "error" y pide al Gobierno que dé marcha atrás

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. / Alejandro Martínez Vélez

El PP intenta moverse para frenar la reforma legal que permite rebajar penas e incluso excarcelar a pesos de ETA después de haber respaldado la tramitación parlamentaria en el Congreso. El primer movimiento se confirmó este martes por la mañana cuando el Senado retiró del orden del día la votación de esa reforma en la Cámara Alta. Los conservadores ganan así un poco de tiempo -siete días en realidad- hasta tener que pronunciarse. El objetivo pasa ahora por aumentar la presión sobre el Gobierno y conseguir que el proponente -el ministro de Justicia, al tratarse de un proyecto de ley- la retire definitivamente para dejarlo sin efecto.

Después de que por la mañana la secretaria general del partido, Cuca Gamarra, contactara con el ministro Félix Bolaños para pedirle "expresamente" que retire la reforma, los dos dirigentes terminaron hablando por la tarde. El PP lamenta que el titular de Justicia haya confirmado que no lo retirarán. La número dos del PP insistió al ministro del ramo en que si el objetivo no era beneficiar a los presos de la banda terrorista, "se puede dar marcha atrás y reparar el error".

Pero Bolaños ha aprovechado esa llamada para preguntarle por "el inesperado cambio de opinión", insistiendo en que es "difícil" de explicar que en el Congreso el PP votara a favor de la ley y en el Senado no presentara enmiendas.

Por otro lado, el ministro de Justicia ha insistido también a Gamarra en que la ley cuenta con un dictamen favorable del Consejo de Estado. 

Alberto Núñez Feijóo llamó también personalmente ayer a la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) para disculparse y este martes ha vuelto a decir que se trata de un error "injustificable". Las otras explicaciones han llegado de la mano del portavoz parlamentario, Miguel Tellado, que aseguró haber "recabado toda la información" sobre cómo se desarrolló la tramitación parlamentaria. También reconoció que "los ponentes del PP que participaron en el debate de las enmiendas" este verano se centraron en las que había presentado Junts, "y posiblemente perdieron de vista otras que podían parecer inofensivas y no lo eran".

Desde el pasado viernes, cuando el PP reparó en el error al que había contribuido y que 'El Confidencial' desveló ayer, los asesores jurídicos del partido le dan vueltas para intentar subsanar la situación. Pero el margen es muy pequeño. El Senado ha retirado del orden del día la votación prevista para este martes y gana una semana hasta tener que pronunciarse de nuevo la Cámara Alta. Si no lo hace e incluso aunque lo haga en contra, la norma saldrá publicada en el BOE de todas formas. De ahí la insistencia ahora en que el Gobierno "sí está a tiempo" de revertir la situación causada si realmente "no quiere beneficiar a los etarras", como dicen en el PP.

Es el mantra que repiten uno a uno los dirigentes de la formación y también en la dirección del grupo parlamentario una vez asumida la negligencia parlamentaria. Aunque el portavoz evitó "buscar responsables" y puso el foco en que lo que toca es "encontrar soluciones", no son pocos los diputados que consideran que tendría que haber consecuencias, mirando especialmente a la asesoría jurídica que revisó el proceso de esa reforma legal en todos los pasos parlamentarios, especialmente cuando Sumar registró las enmiendas.

El error ha causado además un enorme malestar interno en todas las capas del partido y en algunas comunidades autónomas en especial. La crítica que se repite en todos los niveles es que el PP "no puede permitirse" estos errores con un Gobierno "como el de Sánchez" que pacta con EH Bildu y que en tantas otras ocasiones ha utilizado argucias para reformas legislativas que nada tenían que ver con lo que se debatía.

Al mismo tiempo, muchos dirigentes ponen el foco en que los presos de ETA y la defensa de las víctimas del terrorismo "no es un asunto más" para el partido, sino que se trata de algo "demasiado sensible" como para asumir meteduras de pata que causan mucho daño.