El Soberano Poder de San Gonzalo irá a San Jacinto en 2025

El próximo año se cumplen 50 años desde la hechura y bendición del Señor del Soberano Poder, una obra de referencia del imaginero sevillano Luis Ortega Bru. Para conmemorar tan destacado aniversario, la Hermandad prepara un programa de actos conmemorativos que culminará con la salida extraordinaria del Soberano por las calles de Triana en febrero del próximo año. Según desveló ayer el programa «El Llamador», de Canal Sur Radio, la cofradía del Lunes Santo tiene la intención de que el Señor del Soberano Poder procesione solo, por primera vez, en un paso y que visite la Parroquia de San Jacinto.

Un cabildo histórico

El pasado 4 de febrero, los hermanos de San Gonzalo aprobaron en cabildo extraordinario la realización de esta procesión, que se enmarca también en el Año Jubilar a través del camino hacia la sinodalidad convocado por el Papa Francisco. La propuesta contó con un amplio respaldo por parte de los hermanos, lo que demuestra la gran expectación que ha generado este evento.

Un recorrido por el arrabal trianero

La imagen del Señor del Soberano Poder podría visitar algunas como San Joaquín o los Salesianos de Triana, y sin descartar, a día de hoy, la de la O en febrero de 2025, en vísperas de la Cuaresma. De esta manera, el Señor podrá estar cerca de sus fieles en un recorrido cargado de emotividad y simbolismo

Un broche de oro

La salida extraordinaria del Señor del Soberano Poder desde la parroquia de San Jacinto será el broche de oro a este aniversario tan especial. La Hermandad aún está perfilando los detalles de este magno acontecimiento, pero se espera que sea una procesión multitudinaria que congregue a miles de devotos en las calles de Triana.

Un acontecimiento de gran expectación

La salida extraordinaria del Señor del Soberano Poder de San Gonzalo es un acontecimiento muy esperado por la Hermandad, la feligresía de Triana y la ciudad de Sevilla en general. Se espera una gran participación de fieles y devotos que podrán disfrutar de la presencia del Señor en las calles de su barrio.