Adán (0)
Recibió cuatro remates y encajó cuatro goles, varios de ellos parables. Parece contagiado por el pésimo juego del resto del equipo.
Piccini (1)
El lateral bético es de los pocos que cuenta con físico para competir al más alto nivel. Ayer fue de los únicos que subió el balón con algo de sentido e intentó el remate.
Pezzella (0)
Debió taponar mejor a Rami en la jugada del 2-0, pues el central francés remató completamente solo. Parece gafado: de once partidos jugados solo ganó uno (al Sporting en Copa) y perdió siete.
Bruno (0)
No estuvo especialmente mal, pero el Sevilla remató cuatro veces e hizo cuatro goles, señal de que sus delanteros remataron muy cómodos.
Vargas (0)
El peruano va a menos en vez de ir a más. El primer gol nace por un desafortunado cruce suyo a un centro de Mariano, que desvió a su portería, como en Getafe.
Petros (0)
El brasileño es un futbolista válido para la contención, pero a los cuatro minutos ya estaba la eliminatoria más cuesta arriba y su juego fue intrascendente.
Digard (0)
El francés no arranca. Es un futbolista con carácter y alterna acciones de mérito con errores de principiante demasiadas veces.
Joaquín (1)
Lo intentó y puso algún centro peligroso, pero no le sale casi nada y es otro de los que ha ido bajando el nivel de manera progresiva con el transcurso de la temporada.
Portillo (0)
En Getafe fue el mejor del equipo, pero ayer apenas dio una a derechas ante la ordenada presión de los sevillistas, muy superiores en el centro del campo.
Ceballos (0)
Apenas se le vio sobre el campo y fue sustituido al descanso por Fabián. Muy mal partido el suyo. Debe dar mucho más.
Rubén Castro (0)
Anda desconocido el canario, que acumula ocho partidos sin marcar, en los que el resto del equipo solo ha hecho un gol (Molina al Celta). Tremendo dato.
Fabián (1)
Aportó frescura e ímpetu al centro del campo tras el descanso, cuando el Betis al menos llegó en varias ocasiones al área rival. Luego se fue apagando.
Kadir (0)
Merino apostó por el franco-argelino antes que por Van der Vaart o Van Wolfswinkel, pero su presencia en el campo fue intrascendente.
Jorge Molina (s.c.)
Entró al campo en los compases finales, con el partido ya decidido, en lugar de Rubén Castro, y apenas entró en juego, aunque le dio tiempo de ver el 4-0, obra de Kakuta en el último minuto.