Le preguntaban a Quique Setién sobre si al Betis le venía bien el parón de la Liga ahora que el equipo se encuentra en una buena racha de juego y resultados. «Nunca sabes si el parón viene bien o mal. A nosotros nos va a servir para recuperar a algunos jugadores con molestias. Sería mejor jugar ahora otra vez, pero estamos en un punto en el que nos podemos permitir un pequeño descanso, recuperar y reponer las fuerzas. No pasa nada por esperar ahora. No me gusta pero es lo que hay», dijo en la rueda de prensa posterior al partido ante el Espanyol. Al entrenador bético no le hace demasiada gracia estos paréntesis del calendario quizá porque los precedentes esta temporada no son nada buenos para su equipo cada vez que la liga ha hecho un stop por compromisos internacionales: tres derrotas en tres partidos.
La competición se detuvo a finales de agosto tras la segunda jornada y quince días después, el Betis perdía 3-1 en el Madrigal ante el Villarreal. Hubo otro parón de quince días entre la séptima y la octava jornada, en octubre, y el equipo fue goleado en el Villamarín por el Valencia (3-6). Al mes siguiente se repitió circunstancia y el resultado fue el mismo: derrota ante el Eibar 5-0 en Ipurúa.
Solo en el parón navideño hubo regreso a la competición con triunfo, y menudo triunfo. El equipo verdiblanco inauguró el año goleando al Sevilla en el Pizjuán (3-5).
