Image
Actualizado: 08 sep 2020 / 16:43 h.
Facebook Twitter WhatsApp Linkedin Copiar la URL
Enlace copiado
  • Boris Johnson. / EFE
    Boris Johnson. / EFE

Todo parece indicar que Boris Johnson podría forzar la situación respecto al Brexit. De nuevo. Y, ahora, las posibilidades de que así sea son mayores puesto que el índice de popularidad del primer ministro británico se sitúa muy por debajo de lo que pudiera desear Johnson. Está claro que el político necesita un golpe de efecto que desvíe la atención de los británicos hacia lugares alejados de su nefasta gestión de la pandemia.

Johnson, realmente, nunca ha querido llegar a acuerdos con la UE. Ha estado jugando con las palabras, con los plazos, con las reuniones, pero nunca ha querido zanjar un asunto delicado en extremo que oscurece el futuro de toda Europa y, con más fuerza, el del Reino Unido. Cualquiera de los asuntos que se han tratado entre la UE y el Reino Unido sobre el Brexit ha sido motivo de discusión aunque, en ningún caso, de rectificación o cesión por parte de Johnson. Como es lógico, si se intenta llegar a un acuerdo entre partes, ambas tienen que ceder en algunos aspectos. Es eso sobre lo que se sustenta el proceso de negociación.

Ahora, la gran preocupación en la UE no es la amenaza respecto a fechas de acuerdo de las que habla Boris Johnson sino la posible falta de compromiso, respecto a lo firmado en el Acuerdo de Retirada, sobre el régimen comercial de Irlanda de Norte (mantendría una frontera con el resto del Reino Unido) y sobre las ayudas estatales que podrían ser motivo de serio conflicto en el caso de no respetarse. Aunque entre países serios lo que se firma ha de cumplirse, en la UE no están seguros de que el populismo de Johnson alcance extremos ingobernables.

Aunque una falta total de acuerdo se convertiría en la subida de aranceles y de precios para los británicos; aunque las dificultades para negociar con los países europeos serían monumentales; Johnson defiende que cualquier resultado, incluido una salida sin acuerdo, será bueno para el pueblo británico.

Ante una política errática y populista como la de Johnson solo cabe no ceder y hacer cumplir lo pactado. Es necesario mantener firme la postura por el bien de los miembros de la UE.

ETIQUETAS ►