Actualizado: 15 may 2019 / 14:02
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La Romería en honor a San Isidro Labrador que se celebrará este próximo domingo en Los Palacios y Villafranca como una de sus fiestas grandes -no porque esté declarada de Interés Turístico de Andalucía, sino porque en el pueblo de los tomates es grande la devoción a un santo patrón del campo- tiene hoy un prólogo infantil que es en rigor una romería en miniatura, o una jira chica, porque aquí, a esta Romería de ida y vuelta en la misma jornada al parque periurbano de La Corchuela –a unos 10 kilómetros del pueblo por la Carretera del Monte- se le conoce también como Jira.
Y la jira a otro parque, al de las Marismas, al sur del núcleo urbano, es la que han realizado esta mañana todos los alumnos de Infantil de los diez colegios locales en una particular celebración que va ya por su séptima edición.
Casi 500 pequeños de cuatro y cinco años, ataviados con ropa campera y flamenca –el sonido de la flauta y el tamboril, la algarabía de sus madres y maestras- han peregrinado –en autobús- desde sus respectivas escuelas hasta la parroquia mayor de Santa María la Blanca, sede canónica de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, que saldrán el próximo domingo a las ocho de la mañana y subidos en su simpecado tirado por bueyes en una romería que congrega a varios miles de palaciegos.
Los pequeños romeros han entregado en una iglesia más abarrotada y colorida que nunca alimentos no perecederos para Cáritas y han escuchado las palabras que les ha dirigido el párroco, Diego Pérez Ojeda, quien los ha exhortado a mantener viva la fe y el compromiso de sus mayores para con un santo que no solo simboliza bien la raigambre agrícola de este municipio del Bajo Guadalquivir –hasta el punto de que durante mucho tiempo se le consideró el patrón del pueblo, a pesar de que no lo es, sino San Sebastián-, sino que precisamente hoy, 15 de mayo, celebra su festividad.
Ya desde la parroquia sí han procesionado a pie hasta el parque de las Marismas, portando por turnos un pasito de San Isidro y otro de su esposa, Santa María de la Cabeza. La comitiva, organizada por tramos por las maestras y la hermandad que dirige Dolores Murube con estandartes de las propias escuelas, ha llegado al parque casi a mediodía, donde los chiquillos –también los niños de la asociación de discapacitados Aura y los del Centro Ocupacional- han podido disfrutar de una exposición, que se mantendrá hasta este viernes de las llamadas galeras, carrozas hechas de coloridos papelillos y que serán tiradas por bueyes el próximo domingo.
La tradición de estas galeras se ha recuperado en los últimos tres o cuatro años, después de haber estado a punto de perderse, y ahora suman ya más de una decena. Niños, maestros y muchos padres han disfrutado a continuación de una comida de convivencia en el parque, antesala de lo que hará medio pueblo el próximo domingo en La Corchuela, mientras casi el otro medio tiene ya reservada su estancia en hoteles para todo el fin de semana.
