Cuando, a comienzos del verano, el PSOE llevó una moción a la Diputación provincial de Sevilla para que el Plan de Infraestructuras del Transporte y Movilidad 2021-2027 - actualmente en fase de exposición pública- incluyera el desdoble de la carretera autonómica A-471 desde la conexión con la A-4 en Las Cabezas de San Juan hasta el municipio gaditano de Sanlúcar de Barrameda, el PP fue el único grupo que se abstuvo porque la propuesta le parecía “una estrategia de campaña” del socialista Juan Espadas en su papel de candidato a la Presidencia del Gobierno andaluz. Lo cierto es que la lucha política por la conversión de esa carretera autonómica en autovía venía de antes de que Espadas fuera nombrado candidato, y no en balde se habían aprobado mociones similares incluso en los Ayuntamientos, no solo en el de Sevilla capital, sino en el de los pueblos afectados, empezando por el de Lebrija, cuya alcalde, el socialista Pepe Barroso, empezó a reivindicar esta mejora viaria desde que las obras para el desdoble de la N-IV entre Dos Hermanas y Los Palacios y Villafranca (8,5 km.) estuvieron a punto de finalizar. Ahora, la Comisión de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio del Parlamento andaluz acaba de aprobar, por unanimidad, una Proposición No de Ley (PNL) del PSOE en la que se vuelve a demandar el desdoble de esta carretera que une los municipios sureños de la provincia de Sevilla con sus playas más habituales, Sanlúcar y Chipiona. De modo que todas las instituciones públicas –desde las locales hasta el Parlamento- se han pronunciado ya a favor de este desdoble tan demandando en la comarca.
Fue el pasado miércoles cuando la parlamentaria Verónica Pérez, a la sazón secretaria general del PSOE de Sevilla, defendió la PNL. “Las provincias de Sevilla y Cádiz suman tres millones de habitantes, e históricamente han tenido grandes déficits en infraestructuras, lo que ha supuesto un obstáculo para el desarrollo económico y para la movilidad”, advirtió Pérez, quien recordó, además, que la liberalización del peaje de la AP-4 por parte del Gobierno del PSOE –tras medio siglo de funcionamiento- “ha supuesto un hito histórico, un punto de inflexión en la movilidad de Cádiz y Sevilla y una gran oportunidad para ambas provincias, pero hay que seguir avanzando en mejorar las conexiones de dos provincias que tienen un enorme potencial”.
En este sentido, la dirigente socialista ha recordado que la A-471 (entre el cruce de El Torbiscal y Sanlúcar de Barrameda) “soporta un tráfico rodado de 10.000 vehículos diarios, 15.000 en verano, muchos de ellos de gran tonelaje, vinculados a la agricultura”. Así, “el desdoble supondría una gran oportunidad para lograr una conexión mediante carretera de gran capacidad entre Sevilla –sobre todo en el Bajo Guadalquivir- y los municipios situados en la Costa Noroeste de Cádiz”.
Según el alcalde de Lebrija, “en el desdoble de esta carretera hay consenso en todos los Ayuntamientos y pueblos del Bajo Guadalquivir”. De hecho, así se han pronunciado incluso los regidores de Trebujena y Sanlúcar de Barrameda. “Es fundamental para el desarrollo de los pueblos rurales de Andalucía y especialmente del Bajo Guadalquivir el que mejore esta infraestructura que depende de la Junta de Andalucía”, ha dicho Barroso.
“La pelota está en el tejado de Moreno Bonilla”, apuntilló un día antes de la aprobación de la PNL la portavoz socialista en la Comisión de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Beatriz Rubiño. Esta vez no ha habido abstenciones.