Sevilla mira el Guadalquivir para sacar provecho al potencial turístico del que es el único puerto marítimo de interior de España y uno de los más importantes de toda Europa. Así al menos lo avalan los datos del sector, que aseguran que cada año es más elevado el número de turistas que llegan a la ciudad a través de su río.
Pero si es un hecho tangible este crecimiento en la cifra de visitantes, también lo es la subida de cruceros que hacen escala anualmente en el muelle de las Delicias. No se trata de una tendencia novedosa, ya que durante 2015 el sector experimentó un aumentó del 6,67 por ciento y para este año el Puerto de Sevilla mantiene su moderado optimismo al tener ya asegurada la presencia de unos 31 barcos que harán escala a la ciudad. A lo que habrá que sumar, además, las tradicionales escalas que la compañía Belle de Cadix realiza en la capital hispalense, más de una treintena el pasado año.
Del amplio listado para este 2016, aún restan por visitar la ciudad una docena de cruceros, la mayoría de ellos durante el próximo mes de octubre. Antes, al mediodía de este sábado, ha atracado en el muelle de las Delicias el último de ellos: el Europa. Con 199 metros de eslora y 26 metros de manga, se trata de uno de los mayores que ha entrado en el Puerto y el más amplio en lo que va de año. Un barco que salió desde Portimao (Portugal) y que viaja con destino a Almería, con 313 pasajeros y 280 tripulantes que estarán en Sevilla hasta las cuatro y media de la tarde de este lunes.
Está siendo éste un fin de semana especialmente activo en el río. A la llegada ayer del crucero Europa y el pasado jueves del Ocean Majesty se ha sumado hoy domingo la del Silver Wind, que ha atracado en tierras hispalenses a las cinco de esta madrugada y también permanecerá en la ciudad hasta este lunes, cuando seguirá su ruta prevista. Se trata de un barco de dimensiones más reducidas, con 155 metros de eslora y 21 metros de manga, en el que viajan 261 pasajeros y 231 tripulantes.
Por delante queda aún un amplio calendario de cruceros que tendrán en Sevilla a una de sus principales paradas. Así en el mes de octubre se espera la llegada del Nautica (día 1), el Hamburg (día 13) y el Clio (día 15), que repetirá experiencia los días 1 y 6 de noviembre. También se espera que la última semana de octubre sea especialmente intensa con tres cruceros que atracarán en el muelle de las Delicias en otras tantas jornadas consecutivas. Serán el Serenesima (día 25), el Star Pride (día 26), el Aegean Odiseey (día 27) y el Le Lyrial (día 31). Ya en noviembre será el turno, junto al Clio, del Star Breeze (día 8) y el Star Legend (día 19).
Según los datos que maneja el Puerto de Sevilla, este amplio listado supondrá la llegada de unos 20.000 cruceristas a la ciudad, algo más de un 10 por ciento con respecto a las cifras del pasado año 2015. Entonces visitaron Sevilla a través de su puerto marítimo unas 17.600 personas que gastaron una media de 42 euros al día. No se trata de un crecimiento aislado en materia turística, ya que estos datos vienen a sumarse a los buenas cifras que está experimentado el sector en lo que va de año, con un aumento del 13 por ciento solo durante el primer semestre. Algo que a juicio del alcalde de Sevilla, Juan Espadas, redunda en la idea de que la ciudad «va como un tiro» en cuanto al desarrollo turístico.
La terminal de cruceros
Esta apuesta por el puerto marítimo de interior se ha visto reforzada en los últimos tiempos a través de diferentes políticas y actuaciones concretas. Entre ellas, la puesta en marcha de la nueva terminal de cruceros en el muelle de las Delicias. Con una inversión de 1,2 millones de euros –cofinanciados en al 80 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional–, el edificio de 1.000 metros cuadrados está construido con contenedores de mercancías reciclados.
Son algunos ejemplos de las acciones que ha emprendido el Puerto para potenciar el turismo náutico y fluvial. Su presidente, Manuel Gracia, tiene claro que es «una actividad turística que va creciendo» y en la que «se pone continuamente en valor al Guadalquivir para sacarle el máximo partido».
