-¿Le parece oportuno haber presentado juntos el proyecto de la mezquita en Sevilla Este y el del centro comercial adscrito?
-Son dos proyectos completamente distintos. El centro comercial nos va a traer a los sevillanos una riqueza de empleo grandísima, además de un turismo de alto nivel que requiere nuestra ciudad. Sobre que el centro comercial esté adosado a la gran mezquita, es un tema totalmente diferente.
-Por eso le decía que no se entiende cómo se han trasladado a la opinión pública al mismo tiempo.
-Desvinculo ambos proyectos porque no tienen nada que ver, absolutamente nada que ver. Los musulmanes tienen derecho a tener su templo y el centro comercial es otro tema muy aparte, lo que pasa es que daría a la ciudad una riqueza impresionante.
-Ustedes han dicho que el proyecto tiene un sentido “occidental y progresista”, ¿nos podría preguntar por qué han elegido esos dos adjetivos?
-Yo soy sevillano de pura cepa, soy el consejero, soy cristiano católico y devoto de San Bernardo, podemos empezar por ahí. Tenemos una comunidad con una vocalía de igualdad. Nuestras mujeres pueden llevar velo o no pueden llevarlo. Somos occidentales, sevillanos y además todas nuestras vocalías son sevillanos pero son musulmanes.
-Hablan ustedes también de un pretendido ocultismo con el que los ciudadanos de confesión islámica tienen que desarrollar los preceptos de su religión. ¿No cree que hemos avanzado en algo en ese sentido en la sociedad sevillana?
-No lo sé. La gente se asusta porque se está hablando de una mezquita. No entiendo nada, porque en Sevilla hay bastantes mezquitas. Lo que no me gusta es que haya mezquitas en pisos, en locales comerciales, en garajes... Me gustaría que hubiera un gran templo donde todo el mundo estuviera censado y, lo que es una cuestión normal y corriente, todo aquello que sea ocultismo es malo.
-Esta misma mañana, cuando el alcalde de Sevilla ha conocido el proyecto ha dicho que es uno de los que se barajan para esa zona de la ciudad y que para ese mismo solar hay otros proyectos, que todavía no hay nada en firme. ¿Qué opinión tiene al respecto?
-Pues el alcalde habla maravillosamente bien porque ha dicho muchísimas cosas. Ha dicho que hay una falta de información y es cierto, porque este proyecto se ha publicado porque la intención nuestra es llamar a todas las asociaciones de vecinos de Sevilla y que se integren con nosotros para realizar el proyecto. Es todo totalmente transparente. O sea, que el alcalde ha dicho la verdad.
-¿Actualmente en qué momento se encuentra el proyecto y a quién más se lo han presentado además de a las asociaciones de vecinos?
-El proyecto está en la Gerencia Municipal de Urbanismo desde hace tiempo. Está en estudio. Y después nos hemos puesto a hablar con todas las asociaciones de vecinos, hemos hablado con todas las autoridades políticas, con todas las plataformas o al menos estamos en ello, y ese es el avance que estamos teniendo ahora mismo.
-En esa toma de temperatura con las asociaciones de vecinos, ¿qué es lo que la sociedad sevillana a la que representan les traslada?
-Yo estoy muy contento. Hasta ahora lo único que me piden todas las asociaciones es información. Y a todas les digo que me voy a reunir con ellas, que les doy las gracias porque ayer mi teléfono no paraba de sonar y la verdad es que lo veo todo bien, no tenemos ningún problema.
-Decía usted que están disociados ambos proyectos, centro comercial y centro religioso. En el caso de que no se pudiera ejecutar el primero, ¿no corre peligro el proyecto de la gran mezquita?
-Bajo ningún punto de vista. Desde Almutamid, hay mucha gente de aquí que tiene raíces musulmanas.
-Me refiero a la financiación exclusivamente.
-Hay varias fundaciones de Emiratos Árabes, desde hace tres años, están con un entusiasmo pletórico por venir a Sevilla. Hace poco estuvo aquí el monarca de Dubái, por sus propios negocios, y ellos están deseando estar en Sevilla porque muchas raíces de quienes vienen de Dubái son sevillanas.
-Entonces, ¿hay dinero para acometer una gran mezquita en Sevilla?
-Por supuesto. Le quería además hacer un apunte sobre el centro cultural que va asociado a la mezquita. Son 800 metros cuadrados de biblioteca, lleva un centro de sanidad –todo sin ánimo de lucro- para la prevención del cáncer, una sala de estudios, banco de alimentos y que no paramos de atender a Sevilla en asistencia social.
-Es una pena que haya que explicar todo eso cuando de lo que se trata es de construir un centro de culto, ¿no?
-Precisamente por eso es la riqueza del proyecto.