A la Champions... y a trabajar duro (4-1)

El Sevilla cae ante el Real Madrid tras pagar una vez más su fragilidad y su falta de gol en un día con dos tiros al palo, recital de Keylor Navas y en el que mereció mejor suerte

14 may 2017 / 20:17 h - Actualizado: 14 may 2017 / 22:47 h.
"Crónica Sevilla","Sampaoli"
  • Los jugadores del Sevilla celebran el gol de Jovetic. / Efe
    Los jugadores del Sevilla celebran el gol de Jovetic. / Efe

El Sevilla disputará la Liga de Campeones la próxima temporada tras certificar su clasificación matemática este domingo. El empate del Villarreal ante el Dépor (0-0) permitió que la derrota en el Santiago Bernabéu no tuviese mayores consecuencias en esa lucha por el cuarto puesto y que no haya que esperar a la última jornada para conseguir el objetivo del club.

El 4-1 con el que el Real Madrid saldó la visita del Sevilla es un resultado engañoso, podría decirse. El equipo de Jorge Sampaoli estuvo cerca de dar un susto al de Zinedine Zidane, al que sostuvieron su tremenda pegada y los clamorosos errores defensivos nervionenses. Dos tiros al palo y el recital de buenas intervenciones de Keylor Navas impidieron que el buen trabajo tuviera recompensa. Mientras el Sevilla lo intentaba e intentaba jugando casi con lo puesto, el Real Madrid no perdonó cuando se plantó ante Sergio Rico. Así es esto.

Si ya era difícil salir al Bernabéu sin Nasri, Rami, Mariano, Escudero, Sarabia e Iborra, en el calentamiento se lesionó Franco Vázquez. Krohn-Dehli ocupó su puesto. Llevaba más de un año sin jugar por lesión, pero hizo lo que pudo y bien para ayudar a un Sevilla que luchó contra ese Sevilla del segundo tramo de la temporada: un equipo al que, bien por falta de instinto asesino, bien por mala suerte, le cuesta un mundo materializar sus ocasiones y paga carísimas sus concesiones defensivas.

De hecho, un error absolutamente infantil puso el partido de cara a los de Zidane a los diez minutos de partido. Carriço cometió una falta en la frontal del área, se dio la vuelta tras señalarla Undiano Mallenco y mientras el resto de sus compañeros protestaban, Nacho aprovechó que no había barrera para batir a Sergio Rico sorprendiendo a propios y extraños.

Hasta entonces, una buena intervención del portero arrebatando la pelota a Morata en un mano a mano y un disparo de Vitolo que atajó Keylor Navas habían dibujado un partido abierto.

Y lo fue en realidad. Zidane dio descanso inicialmente a hombres como Marcelo, Modric, Isco o Benzema, y aunque sus compañeros son capaces de tumbar a cualquiera, la diferencia está ahí. Cuando el Sevilla se asentó y jugó con inteligencia, el Real Madrid se tambaleó. Jovetic tuvo dos ocasiones clarísimas para empatar tras el 1-0, no así la suerte ni el acierto necesarios. En la primera mandó la pelota a la escuadra tras engancharla en la frontal del área; en la segunda, Keylor Navas volvió a interponerse.

Y claro: pese contemplarlas con inquietud, el Real Madrid no perdonó cuando las tuvo. Una inocente pérdida de Kranevitter en el centro del campo motivó la salida en bloque de los merengues, que hicieron el 2-0 en un rechace de Sergio Rico a disparo de James que Cristiano Ronaldo no dejó escapar (23’). Por cierto: el portugués propinó un golpe en el rostro a Lenglet sin ser castigado por Undiano. Nada nuevo. Es increíble que siga arbitrando. Morata incluso le aplaudió y se quedó en el campo.

El Sevilla tiró de orgullo y calidad hasta el punto de poder recortar distancias, pero entre un gran Keylor Navas que firmó dos paradones ante Correa primero y Jovetic, después, y el larguero, que también se interpuso en un lanzamiento del montenegrino, dejaron todo tal como estaba.

Sampaoli movió ficha en el descanso. Dejó en la caseta a Nico Pareja y dio entrada a Montoya, casi inédito desde su llegada en invierno. Le situó en la derecha para poner a Mercado en la izquierda y dar más libertad a Vitolo. Determinante el canario, siempre luchando y generando fútbol contra viento y marea. Precisamente, una combinación entre Vitolo y Jovetic permitió a éste marcar el 2-1 con un balón ajustado al palo desde la frontal (49’). Merecido premio a un Sevilla que metió el miedo en el cuerpo al equipo de Zidane mientras el Barcelona iba ganando su partido contra la UD Las Palmas.

El empate, pese al 2-0 con el que se había puesto el partido, se veía más cerca que el tercer tanto del Real Madrid. El Sevilla insistió, Zidane dio entrada a Casemiro y Lucas Vázquez para reorganizar a los suyos... y Cristiano apareció en una nueva peligrosa pérdida en campo propio –esta vez de Montoya– para poner el balón en la escuadra tras un pase atrás de Kroos (78’). Con Modric también ya en el campo y Asensio demostrando su talento, el alemán firmó el 4-1 en otra jugada rápida con pase atrás de Nacho (83’). Fin a la historia. Los regalos no salen gratis. Ahora, con la Champions asegurada, toca trabajar y muy duro en el nuevo proyecto.

FICHA TÉCNICA

4 - Real Madrid: Keylor Navas; Danilo, Varane, Sergio Ramos, Nacho; Kovacic (Modric, m.71), Kroos, Marco Asensio; James (Casemiro, m.60), Cristiano Ronaldo y Morata (Lucas Vázquez, m.60)

1 - Sevilla FC: Sergio Rico; Mercado, Nico Pareja (Montoya, m.46), Mercado, Lenglet, Vitolo; Krohn-Dehli (Diego González, m.88), N’Zonzi, Kranevitter; Jovetic y Correa (Ben Yedder, m.88).

Goles: 1-0, m.10: Nacho. 2-0, m.23: Cristiano Ronaldo. 2-1, m.49: Jovetic. 3-1, m.79: Cristiano Ronaldo. 4-1, m.86: Kroos.

Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Amonestó a Danilo, Morata, Nacho y Lucas por el Real Madrid; y a Mercado y Correa por el Sevilla.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 37ª jornada de la Liga disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 79.356 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por Yanko Daucik.