-
-
Ben Arfa, durante un partido de la temporada 2016-17 con el PSG. / Efe
Hatem Ben Arfa y El Sevilla vuelven a estar relacionados en una nueva ventana de traspasos. El franco-tunecino de 31 años siempre ha estado en la lista de intereses del equipo nervionense y este verano parece que no va a ser una excepción. El jugador del PSG finaliza su vinculación con el club parisino en dos días, el próximo 30 de junio, y su traspaso no conllevaría coste alguno más allá de su ficha.
Además del interés sevillista, según RMC, hay que sumar el del Borussia Dortmund, que le habría ofrecido un contrato de tres años, ya que su nuevo técnico, Lucien Favre, quiere contar con él a toda costa, pues se quedó con ganas de dirigirlo durante su periplo en el Niza. Favre llegó una temporada después de que Ben Arfa pusiera rumbo a París tras un curso brillante durante la campaña 2015-16 en el equipo de la Costa Azul , en el que el atacante firmó uno de los mejores años de su carrera deportiva al anotar 17 goles en la Ligue 1 de Francia.
Fue en dicha temporada cuando estuvo a un paso de firmar por el equipo de Nervión, pero cuando ya estaba todo apalabrado apareció el PSG, con Emery a la cabeza, y se llevó al jugador. También está muy atento el Olympique de Lyon, club de formación de Ben Arfa, con el que sus representantes mantienen contactos frecuentes.
Sin embargo, hay una baza que juega a favor del Sevilla, ya que tanto el atacante como su entorno son unos enamorados del juego que se practica en la Liga española y creen que es el tipo de fútbol que mejor le viene a Ben Arfa para desarrollar sus cualidades y mostrar su mejor versión. Las conversaciones entre el club hispalense y los representantes del jugador están muy avanzadas según indican desde Francia, pero el Sevilla todavía no les ha trasladado una oferta en firme.
Aun así, el franco-tunecino no tiene prisa por elegir destino, ya que está concentrado únicamente en su plena preparación física tras caer en el ostracismo al que Unai Emery lo ha sometido durante esta pasada temporada, en la que no ha jugado ni un sólo partido.