Menú

Demasiado débil en las áreas (4-2)

El Sevilla se despidió del tercer puesto regalando el triunfo a un Málaga que lo acabó goleando. Gran partido de Franco Vázquez y noche negra de Pareja, que falló en los dos últimos goles

01 may 2017 / 23:10 h - Actualizado: 02 may 2017 / 00:52 h.
  • Los jugadores del Sevilla se lamentan tras el último gol del Málaga. / Efe
    Los jugadores del Sevilla se lamentan tras el último gol del Málaga. / Efe

Un equipo que recibe cuatro goles como los encajados por el Sevilla en La Rosaleda ante un Málaga bastante limitado tiene casi imposible ganar el partido. Y como el equipo nervionense adolece de una evidente falta de pegada, pues el 4-2 que ha encajado ante el equipo costasoleño se explica solo. El Sevilla se despidió amargamente de la lucha por el tercer puesto regalando el partido a un Málaga que aceptó el presente y que terminó goleando ante la falta de madurez sevillista. Ahora le quedan a los de Nervión tres citas –9 puntos– para mantener la ventaja de cinco respecto al quinto, un Villarreal sólido en defensa y que sí sabe rentabilizar sus goles.

Muy pronto quedó claro que el Málaga había cambiado sus chanclas por las botas de verdad, motivado como siempre ante el Sevilla en uno de los partidos de la temporada en La Rosaleda. Intensidad y repliegue rápido, la receta de quienes saben que el equipo nervionense no es eléctrico, salvo excepciones. Transcurrían los minutos y no pasaba nada en las áreas. Lo más destacable de los primeros 20 minutos fue un tiro defectuoso de Escudero desde fuera del área y un pase lateral de Jonny a Sandro que el delantero no acertó a rematar. Esas dos acciones y también el hecho de que el Sevilla, en un partido sin nada, tenía ya tres amarillas lamentables: Escudero, Sarabia y Franco Vázquez quedaron amonestados por entradas muy eludibles en los dos primeros casos y una evidente simulación dentro del área del centrocampista argentino, que intentó engañar a Martínez Munuera. Al final el cuadro de Sampaoli se fue a los vestuarios con otra tarjeta más tras una falta de Camacho a Correa que el sevillista encajó mal.

Muy torpe el Sevilla en el manejo de un encuentro que se le puso de cara en una excelente contra iniciada por Franco Vázquez con un caño maravilloso a Camacho, continuada por el argentino hasta el borde del área, donde abrió a Ben Yedder a la derecha para que el francés se la devolviera al punto de penalti y el Mudo batiera a Kameni tras golpear su tiro en Luis Hernández. Fue un gran ejercicio de conducción, calidad técnica y desmarques de los sevillistas. Dentro de la absoluta mediocridad del partido, el Sevilla era bastante mejor que los de Míchel y pudo poner más tierra de por medio si en los minutos que siguieron al 0-1 hubiera estado más acertado en el área, pues tanto Sarabia como Correa se metieron en ella por la derecha y buscaron a alguien en el punto de penalti para que imitara a Vázquez en el gol. No hubo receptor en ninguno de los dos casos. Pero la gran oportunidad fue para Correa, cuya facilidad para ponerse de gol asombra tanto como sus habituales fallos con todo a favor: Franco Vázquez le dejó completamente solo ante Kameni tras un acertado pase de cabeza, pero el ex de la Sampdoria, con el balón botando, la elevó demasiado y el esférico se perdió por encima del larguero de forma lastimosa. La falta de pegada una vez más dio la cara, para lamento de Sampaoli.

El técnico sevillista no se lo podía creer y entró en furia total cuando vio cómo el Málaga empataba un minuto después, cuando Fornals aprovechó la incapacidad sevillista para despejar un balón en varios intentos y sacarse un zapatazo desde la frontal que entró por toda la escuadra izquierda de la portería de Sergio Rico. Otra vez tablas y otro equipo que le hacía daño al Sevilla con muy poco. Así se llegó al descanso, con al sensación de que el partido se lo llevaría quien estuviera más centrado en las dos áreas.

Normalmente el Sevilla sale ganador en este tipo de duelos, aunque resulta milagroso que un equipo con esas debilidades haya estado dos tercios de la Liga acosando a Madrid y Barça y haya llegado a los octavos de la Champions, de la que se despidió anunciando las calamidades que sacó a relucir en Málaga. La segunda parte empezó con un genial pase de Correa a Ben Yedder, a quien el brazo de Luis Hernández le impidió comodidad para llegar antes que Kameni. Seguía llevando el peso del partido un Sevilla que basaba sus esperanzas en la superior calidad de sus jugadores, que siempre merodeaban el área blanquiazul. Pero una increíble patada al aire de Pareja brindó a Sandro la oportunidad de batir a Sergio Rico: lo hizo con un tiro sin colocación que entró por debajo de las piernas del portero sevillista. El Málaga le había hecho dos goles al equipo de Sampaoli con apenas tres llegadas al área. Sin embargo, el joven Luis Muñoz devolvió pronto el favor, pues también falló clamorosamente en el despeje para dejar a Franco Vázquez solo ante Kameni y con el balón controlado: 2-2 con más de media hora para saber jugar un encuentro enloquecido.

Pero no supo hacerlo el Sevilla, que tuvo al Málaga a merced durante un buen rato. Los de amarillo entraban por ambas bandas y en otro centro de Sarabia calcado al del 2-2 Iborra cabeceó para casi hacer el 2-3, que evitó Kameni con una gran estirada y una buena mano al rechazo que cogió Vázquez. Y volvió a suceder: perdonó y no lo perdonaron, pues Sandro ejecutó una falta muy centrada y Llorente le ganó la partida por arriba a las torres del Sevilla para poner un 3-2 que rindió al equipo de Nervión definitivamente. El resultado lo amargó aún más Juankar, quien cogió el rechazo del primer penalti parado por Sergio Rico –a Sandro, derribado por Pareja y lanzador de la pena máxima– para dejar el acontecimiento en nada. Fue así de cruel e impotente la forma en que el Sevilla se despidió de un billete que da derecho a saltarse la peligrosísima primera ronda de una Champions que todavía debe asegurar.

FICHA TÉCNICA

Málaga CF: Kameni; Luis Muñoz, Luis Hernández, Llorente, Ricca (Torres, m. 71); Ontiveros (Keko, m. 86), Camacho, Recio, Jony (Juan Carlos, m. 57); Fornals y Sandro.

Sevilla FC: Sergio Rico; Mercado (Vietto, m. 83), Pareja, Lenglet, Escudero; Correa, N’Zonzi, Kranevitter (Iborra, m. 53), Sarabia; Franco Vázquez y Ben Yedder (Jovetic, m. 71).

Goles: 0-1, M: 29: Vázquez. 1-1, M: 37: Fornals. 2-1, M. 50: Sandro. 2-2, M: 56: Vázquez. 3-2, M: 76: Llorente. 4-2, M: 88: Juan Carlos.

Árbitro: Martínez Munuera (Colegio Valenciano). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Camacho (m. 38), Ricca (m. 48) y Juan Carlos (m. 90); y a los futbolistas del Sevilla Escudero (m. 7), Sarabia (m. 17), Vázquez (m. 27), Correa (m. 38) e Iborra (m. 75).

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima quinta jornada disputado en el estadio La Rosaleda ante 28.000 espectadores. El Unicaja, reciente campeón de la Eurocopa de baloncesto, ofreció el título al público antes del encuentro.