Los constructores avisan: la obra pública está al borde de otra crisis

Tras las duras críticas contra la Junta, la patronal achaca ahora la caída de la licitación al Estado

14 sep 2016 / 23:09 h - Actualizado: 14 sep 2016 / 23:23 h.
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  • Obras en marcha del futuro enlace de la SE-40 a la altura de Espartinas, en Sevilla. / Pepo Herrera
    Obras en marcha del futuro enlace de la SE-40 a la altura de Espartinas, en Sevilla. / Pepo Herrera

El rebote al alza de la licitación de obra pública de 2014 no se va a repetir. La patronal de la construcción asegura que el segmento de la obra pública «se coloca en la antesala de una nueva fase recesiva» en la región. De hecho, en el primer semestre del año, Andalucía registró un descenso interanual de la licitación pública del 38,6 por ciento, cifra que duplica la caída nacional (19 por ciento). Eso sí, la construcción residencial se acelera, dando un respiro al sector.

Esto es lo que recoge el informe económico Comportamiento de la actividad de la construcción durante el segundo semestre de 2016 de Fadeco Contratistas, que achaca el retroceso de la licitación a la importante caída de la inversión a cargo del Estado, que registra en el primer semestre un descenso acumulado del 62 por ciento en comparación con ese periodo de 2015.

Ahora la patronal mira al Estado, después de que la pasada semana arremetiera contra la Junta por renunciar al 80 por ciento de la obra civil comprometida. Duras críticas que han provocado que hoy mismo promotores y constructores se reúnan con el consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López.

De hecho, en el informe de Fadeco se señala que la licitación de las corporaciones locales cayó un 23,3 por ciento, mientras que la obra promovida por la Junta experimenta un alza del 4,9 por ciento, si bien «en valores absolutos, la cifra de 134,59 millones de euros es la menor de todas las administraciones públicas».

Para el presidente de Fadeco Contratistas, Francisco Carmona, si tenemos en cuenta que en el primer trimestre el descenso se situaba en el 64 por ciento, podemos decir que la intensidad de la desaceleración de la inversión pública se ha moderado. Sin embargo, añade que esta visión optimista no descarta la apreciación que se hacía en el anterior informe, en el sentido de que, con estas cifras, el segmento de la obra pública «se coloca en la antesala de una nueva fase recesiva».

Los datos del primer semestre del año revelan, según la patronal, cómo las posibilidades de que pueda producirse un rebote al alza de la licitación, como sucedió en 2014, «parecen esfumarse».

En cuanto a los motivos, Fadeco no los tiene claros, ya que la situación de interinidad del Gobierno estatal no ha penalizado la inversión en otras comunidades autónomas.

Fadeco denuncia que Andalucía es de las pocas comunidades que han sido «penalizadas» por la menor inversión estatal y en la que la distribución de la inversión pública «parece que no ha respondido a criterios de vertebración territorial y de cohesión económica y social, como reflejan los datos provincializados».

Para la patronal, esta situación ya no es achacable al parón político, sino a desequilibrios acumulados que afectan a las cuentas públicas.

En su informe, los constructores recuerdan que España tendrá que hacer recortes entre 2016 y 2018 que oscilan entre los 5.000 y 8.000 millones, por lo que parece «evidente» que la mera supresión del dinero para obra pública «no es suficiente para lograr los ajustes que exige la corrección de las cuentas públicas». «Recurrir a la reducción de la licitación pública para equilibrar las cuentas es una opción agotada», defiende la patronal andaluza.

Así, a la pregunta de si el retroceso de la inversión pública es meramente coyuntural, «la respuesta es que los factores expuestos así lo confirman, y a ellos hay que aferrarse», en alusión a las decisiones políticas de los últimos años.

En la provincia de Sevilla, la licitación del Estado pasó de los 110,59 millones de euros en los primeros seis meses de 2015 a los 25,15 del mismo periodo de 2016, un 76,8 por ciento menos. No obstante, contando con las obras de otras administraciones, en la provincia hispalense la caída de la licitación pública fue del 46,9 por ciento hasta junio.

El informe de Fadeco Constructores apunta que la actividad en el segmento de la edificación residencial mantiene en 2016 el ritmo de crecimiento gradual y sostenido que se inició en 2014. El precio medio de venta de las viviendas se incrementó en este primer semestre en algunas zonas; la concesión de préstamos con garantía hipotecaria, y su importe medio, se aceleró; las transacciones o ventas de viviendas avanzaron a una tasa de dos dígitos, y se registró un aumento de los visados para la edificación de nuevas viviendas. En Andalucía, aunque las ventas de pisos usados representan el 82,13 por ciento del total, un porcentaje significativo son en realidad viviendas sin estrenar, por lo que el incremento del 25,04 por ciento que experimentan las transacciones de las mismas con respecto al mismo mes de 2015 reflejan una aceleración de la absorción del stock acumulado.

Un dato relevante es el aumento de las ventas de viviendas de nueva construcción, del 2,05 por ciento, con respecto a las producidas en junio de 2015; incremento que en Andalucía se sitúa en el 8,6 por ciento. Y es relevante porque viene a confirmar la línea ascendente que se inició en 2015. En definitiva, parece que se abre a futuro un escenario de oportunidades para el sector que se irán concretando a medida que se recuperen factores como el empleo. Si las decisiones «oportunistas» no lo impiden, todo apunta hacia un nuevo resurgir residencial con un modelo distinto: el mercado de oferta dará paso a un mercado de demanda acorde a las necesidades de sus destinatarios.