La Guardia Civil ha desarticulado una banda de narcotraficantes que atravesaba España en vehículos de lujo robados y a una gran velocidad. La operación Niebla se desarrolló en Málaga y Algeciras (Cádiz) y culminó con el arresto de 20 personas y la imputación de otras dos.
Los detenidos son 11 marroquíes, cuatro españoles, dos franceses, un tunecino, un inglés y un holandés. Todos circulaban a velocidad extrema "poniendo en peligro su vida y la de otros usuarios", según informó ayer la Guardia Civil en un comunicado. El instituto armado considera que se trataba de una de las bandas "más activas dedicadas al tráfico de drogas" del país.
Mediante este método, denominado go fast routier, los narcotraficantes trasladaban a Francia la droga, que importaban desde Marruecos a España en embarcaciones, en vehículos de alta gama previamente sustraídos y acondicionados con dobles fondos. La operación ha permitido incautar 263 kilogramos de hachís, once coches, una embarcación pesquera, teléfonos móviles, sistemas informáticos y algunos objetos electrónicos.
Los narcotraficantes circulaban en carretera a altas velocidades por rutas preestablecidas y siempre precedidos por vehículos lanzadera que avisaban de cualquier presencia policial.Las investigaciones se iniciaron en abril de 2009 a raíz de datos obtenidos en otras actuaciones que pusieron sobre la pista de la existencia de esta organización, compuesta por tres subgrupos perfectamente estructurados, con misiones diferenciadas y que actuaban independientemente para dificultar la labor de la Policía y de la Guardia Civil.
Uno de estos grupos era el encargado de adquirir el hachís en el norte de África y de trasladarlo en embarcaciones pesqueras o de recreo a las costas del campo de Gibraltar. Una vez que la droga estaba en España, era escondida en lugares seguros, que en la jerga policial llaman guarderías, donde se custodiaba hasta que los otros dos subgrupos preparaban la infraestructura necesaria para su traslado a Francia, en la localidad de Toulon, desde donde distribuían la droga. Las investigaciones, dirigidas por el Juzgado de Instrucción 2 de Torrevieja (Alicante), corrieron a cargo del Equipo Contra el Crimen Organizado de la Unidad Central de la Guardia Civil con sede en Málaga.
