Alberto Benito -izquierda- durante la presentación de Dubarbier como jugador del Almería.
En el Betis siguen a la búsqueda de un director deportivo con plenos poderes para planificar la próxima temporada. Son muchos los candidatos pero ninguno, de momento, el elegido. Los nombres que en principio sonaron con más fuerza, como los de Toni Muñoz (Getafe) y Felipe Miñambres (Rayo) se han desvanecido, pues ambos mantienen contrato en vigor con sus respectivos clubes y no está el verdiblanco en condiciones de hacer ofertas mareantes a los interesados para convencerles de que rescindan.
Así que el ramillete de candidatos se va reduciendo y uno de los mejor colocados es Alberto Benito, director deportivo del Almería desde la temporada 2007/08, club con el que los verdiblancos miden fuerzas este domingo en el estadio de los Juegos del Mediterráneo. Benito llegó al Almería, procedente del Cádiz donde estuvo durante diez temporadas, primero como jugador y luego como director deportivo, en la temporada 2007/08, la del debut del la UD Almería en Primera división, categoría que alcanzó de la mano de Unai Emery, que logró dejar al equipo 8º antes de dar el salto al Valencia, donde cuajó cuatro campañas muy regulares (6º la primera y tres veces 3º).
La primera temporada de Alberto Benito en el Almería, donde quien lleva la voz cantante en los fichajes, como en todo, es el presidente Alfonso García, llegaron al club jugadores como Álvaro Negredo cedido por el Madrid, que luego lo repescó y vendió al Sevilla, el portero Diego Alves hoy en el Valencia, el defensa Felipe Melo traspasado al Genoa por más del cuádruple de lo que costó o el centrocampista Iriney, que luego recalaría en el Betis conla carta de libertad. Pero con gente como Negredo, Alves, Juanma Ortiz o Melo ganó el Almería mucho dinero, igual que ocurrió con Chico o Leo Ulloa. En el debe también hubo fiascos como los de Álex Quillo, Goitom, Borzani, Fabián Vargas, Valeri, Marcelo Silva o el mismo Feghouli, con los que el Almería se fue a Segunda en la 2010/11, de la mano de Juanma Lillo, José Luis Oltra y Roberto Olabe.
Alberto Benito tuvo de entrenadores en el Almería a Unai Emery en la 2007/08, que el equipo acabó en un excelente 8º lugar, la mejor clasificación de su historia. Luego en la 2008/09 estuvieron Gonzalo Arconada (1 a 16) y Hugo Sánchez (17 a 38) y el equipo acabó 11º. En la 2009/10 Hugo Sánchez duró 15 jornadas y lo suplió hasta el final de Liga Juanma Lillo, con el que acabó 13º, con 42 puntos. En la 2010/11 llegóp el descenso con Lillo, Oltra y Olabe. En la 2011/12 Lucas Alcaraz y Esteban Vigo no lograron meter al Almería en la zona de ascenso por un punto, lo que sí lograría el año siguiente Xavi Gracia hoy en Osasuna, aunque no le valdría para renovar, pues esta temporada el entrenador ha sido el ex futbolista Francisco, que ha sido mantenido en el cargo pese a los altibajos del equipo, que lleva toda la campaña luchando por eludir el descenso a Segunda división.
Estos han sido, a grandes rasgos, los principales fichajes hechos por Alberto Benito en el Almería, donde la voz cantante, como queda dicho, la lleva el presidente. Cuando Emery se fue al Spartak de Moscú el nombre de Benito llegó a sonar para acompañarle, pero la rápida destitución del vasco no dio lugar a ello.
CANDIDATOS. En el Betis, la opción de Alberto Benito es en estos momentos una de las mejor valoradas para la dirección deportiva, aunque también siguen en cartera las de Miguel Torrecilla (Celta), Ángel Martín González (Osasuna) y otros nombres que aún no han salido a la palestra y con los que también hemos negociado, según fuentes del club.
En el Betis quieren presentar al nuevo director deportivo cuanto antes, pero es posible que haya que esperar al término de la Liga, pues varios de los candidatos dirigen a equipos directamente implicados en la lucha por la permanencia. El director deportivo es la piedra angular sobre la que construir el proyecto del ascenso, pues de él dependerá la elección del entrenador o la continuidad de Calderón, que a día de hoy se antoja muy complicada la lista de bajas y altas en la primera plantilla, que se antoja numerosa después del pobrísimo rendimiento ofrecido esta campaña por muchos de los jugadores, que tampoco han dado muestras de formar un vestuario demasiado unido y en que habrá que meter el bisturí a fondo.
