Local

Andalucía exige financiación y la deuda

La reunión mantenida el sábado por el presidente de la Junta, Manuel Chaves y José Luis Rodríguez Zapatero en la Moncloa ha servido -así lo confirma el propio gobierno andaluz- para desbloquear la liquidación de la llamada deuda histórica que encalló en septiembre pasado cuando tanto el Gobierno central como la Junta fueron incapaces de ponerse de acuerdo...

el 15 sep 2009 / 20:12 h.

La reunión mantenida el sábado por el presidente de la Junta, Manuel Chaves y José Luis Rodríguez Zapatero en la Moncloa ha servido -así lo confirma el propio gobierno andaluz- para desbloquear la liquidación de la llamada deuda histórica que encalló en septiembre pasado cuando tanto el Gobierno central como la Junta fueron incapaces de ponerse de acuerdo en una cifra para cuantificar la Disposición Adicional Segunda del Estatuto Andaluz, que mandataba a que se hiciese antes del pasado 20 de septiembre. Entonces, como ahora, la Junta presentó una horquilla para cuantificar el pago (entre 1.148 y 1.742 millones de euros), pero no ha sido hasta esta última reunión cuando Zapatero se ha mostrado dispuesto a pactar una cifra dentro de ese margen, ya que la presión ejercida por Cataluña, cuyo Estatut también fue incumplido, impidió que fuera posible en los plazos previstos. La negociación de la deuda histórica se está produciendo en paralelo al nuevo sistema de financiación autonómica porque la Junta ha condicionado su apoyo al nuevo modelo al pago de esa deuda. Pese a ello, Andalucía ya ha mostrado su disposición a suscribir el modelo que el Gobierno tiene en circulación, en el que aumenta la autonomía financiera de las comunidades (con la cesión del 50% del IRPF y el IVA y el 58% de los impuestos especiales) y en el que se redefinen los mecanismos de solidaridad, como reclama Cataluña. En lugar de garantizar el cien por cien de los servicios básicos (educación, sanidad y servicios sociales), en el borrador está previsto que el Estado sólo garantice el 80%. La reunión de Chaves con Zapatero se produce inmediatamente después que la cita con Montilla. La Generalitat quiere cerrar un acuerdo bilateral y el empeño de la Junta es dar voz a todas las comunidades. Hoy, parece más cercano que nunca el acuerdo de financiación y la deuda, una cuestión irrenunciable, que nunca debe servir a los agravios comparativos.

  • 1