Una empleada de Correos y Telégrafos de España, cuyo nombre responde a las iniciales A. P. P. , de 36 años de edad, fue víctima de una brutal agresión al mediodía de ayer en un bloque de viviendas de la calle Fernando Villalón, en el entorno de Viapol. Una vecina del bloque supuestamente aquejada de problemas psicológicos habría sido la autora de esta fuerte agresión. Según informó la Policía Nacional a este periódico, esta mujer, L.F. N.G., tiene 40 años de edad y está detenida en dependencias policiales.
Testigos de los hechos aseguraron tras lo sucedido que la víctima sufrió una herida «bastante grande» en el cuello después de haber sido supuestamente degollada.
Según relató a la agencia Europa Press Guillermo, un joven que trabaja como portero en el número tres de la calle Fernando Villalón, pasadas las 13.00 horas de ayer, esta trabajadora de Correos y Telégrafos de España, una persona bastante conocida en el barrio, entró como de costumbre en el portal «para hacer su trabajo, como siempre».
En aquellos momentos, según el testimonio de Guillermo, la presunta autora de la agresión, que reside en el edificio junto a sus padres y sufriría supuestamente problemas psicológicos, pasó «por detrás» de la víctima y el propio portero se percató de que esta mujer «miró con cara rara» a la portera.
Fue en ese momento, según su relato, cuando «la luz se apagó» como consecuencia del mecanismo automático de ahorro del sistema eléctrico del bloque. «Cuando fui a encender la luz, ella sacó algo del bolsillo, fue detrás de la cartera y le hizo un corte bastante grande en el cuello».
«La cartera estaba haciendo su trabajo tan normal. No habían discutido», enfatizó este joven visiblemente conmocionado por la agresión presenciada. A partir de ahí, la víctima se habría llevado las manos al cuello para intentar tapar la hemorragia, el portero del bloque corrió en su auxilio y alertó a los servicios de urgencia y la presunta autora de la agresión se habría refugiado en el domicilio familiar, siendo posteriormente «detenida» por la Policía Nacional.
Otro trabajador que ha colaborado en las labores de auxilio relató a Europa Press que la víctima sangraba «a borbotes».
«La ha degollado con un tajo limpio. Ha debido usar un cuchillo» manifestó este joven explicando que la agresora sufre una enfermedad psíquica y que la víctima es una mujer de aproximadamente 30 años, con descendencia, y «es una persona conocida y habitual de este barrio, un verdadero encanto», apostilló muy afectado por lo sucedido.
En ese sentido, este testigo detalló sus esfuerzos por «taponar la herida» de la víctima de cualquier manera, porque «la ambulancia ha tardado en venir», indicó contrariado.
Pasadas las 14.30 horas, la mujer herida había sido evacuada y la supuesta autora de los hechos estaría ya detenida, pues la Policía Nacional se hizo cargo del asunto.
Tras lo sucedido, fueron movilizados la Policía Nacional, la Policía Local y los facultativos sanitarios del 061, que evacuaron en ambulancia a la mujer herida al hospital Virgen del Rocío de la capital hispalense, donde ingresó consciente.
Según fuentes policiales, al lugar de los hechos se trasladaron agentes de la Policía Científica, así como de Homicidios y de Seguridad Ciudadana. En total, alrededor de una decena de agentes solo de la Policía Nacional.
Estas mismas fuentes aseguraron en la tarde de ayer que se estaba esperando para tomar declaración a los testigos y que, en esos momentos, solo constaba uno. No obstante, desde la Policía Nacional se informó de que no descartan que a lo largo de la investigación que acababa de comenzar se puedan localizar y tomar declaración posteriormente a más testigos de este violento y desconcertante suceso.
Posteriormente, los servicios sanitarios informaron de que la trabajadora de Correos apuñalada fue intervenida de urgencia y su pronóstico era grave. La operación quirúrgica tuvo lugar en el Hospital Virgen del Rocío, desde donde informaron de que la mujer herida, de 36 años de edad, estaba en una situación estable.
Su pronóstico era grave al cierre de esta edición, si bien se informó de que su vida no corría peligro.
Ese suceso registrado ayer en la capital hispalense rompe un periodo sin grandes sobresaltos en la ciudad, puesto que hay que remontarse a bastantes meses atrás para encontrar otro incidente en el que mediara un apuñalamiento.
De hecho, en los últimos tiempos en Sevilla sí se están registrando atropellos graves o alguna reyerta, pero los incidentes con armas blancas se han reducido de forma significativa, según fuentes policiales. Eso sí, en barrios donde las drogas están muy presentes, como el Polígono Sur o Los Pajaritos, sí se suelen registrar por este motivo.
