Salvar vidas no es algo que solamente pueda hacerse en Haití. Aquí mismo, sin ir más lejos, el heroismo es una práctica común y sencilla; casi un trámite. Un simple acto, que en la mayoría de los casos apenas dura 15 minutos, puede bastar. Con el eslogan Done sangre, donde vida, las autoridades hacen campaña para que los ciudadanos se acerquen al Centro Regional de Transfusión de la Avenida Manuel Siurot o acudan a las unidades móviles que recorren a diario Sevilla y provincia. Es el caso del autobús de hemodonación, que hoy, por ejemplo, volverá a estar en la Campana de 5 a 9.
Pero, ¿por qué es tan importante donar sangre? La razón principal es de dominio público: se trata de un medicamento vital que no se puede fabricar. Por ello es muy importante mantener unas reservas que garanticen no ya la atención sanitaria en la excepcionalidad de las catástrofes, sino el milagro cotidiano de salvar vidas que se produce en todos los hospitales. Es muy normal que cualquier persona a lo largo de su vida necesite una transfusión, ya sea en operaciones, un accidente, muchas enfermedades...
Existe cierta indecisión e incluso prevención que son absolutamente injustificadas. Todas las donaciones siguen los mismos pasos: primero tendrá que rellenar un cuestionario previo, no demasiado largo. En él tendrá que facilitar los datos personales y responder a unas sencillas preguntas sobre su salud. Después pasará con un médico que le hará un pequeño reconocimiento, para saber si puede donar en ese momento o no. Y una vez que el médico dé el visto bueno se procederá a la donación en sí, que dura unos diez minutos, aunque depende de cada persona. Luego viene la recompensa del refrigerio. Varios tipos de refrescos, dulces y bocadillos que se ofrecen para que el generoso ciudadano recupere las fuerzas. Un final perfecto a una buena obra.
No todas las personas pueden ser donantes de sangre. Hay unos requisitos indispensables: tener más de 18 años, pesar como mínimo 50 kilos y gozar de buena salud en general. Y en caso de ser mujer, no estar embarazada. Los ciudadanos pueden ser aún más activos en esta tarea: si pertenece a un colectivo, ya sea una hermandad, asociación de cualquier tipo (de vecinos, equipo de fútbol, etc.) y desea organizar una donación sólo tiene que ponerse en contacto con el centro y concertar una cita con la unidad móvil. El único requisito es que debe asegurar un mínimo de 25 o 30 personas para donar. En todos los casos se trasladará un médico, un celador y como mínimo un enfermero, que atenderán a las personas en el lugar indicado.
La donación de sangre es un acto totalmente altruista por parte del donante, sin embargo siempre tienen preparado algún detalle para todo aquel que decide llegarse, así como el parking gratuito, algo que se agradece.
