Ayamonte se volcó con el día grande de la estancia de la venerada Virgen de Fátima en la localidad onubense. Balcones engalanados con mantones de manila, banderolas en las calles y el fervor de miles de personas acompañaron a la imagen en su visita al pueblo 60 años después.
Tras su llegada en barco la noche del viernes por las aguas del Guadiana, el primer día de estancia de la Virgen en Ayamonte estuvo cargado de actos y emotividad. Por la mañana se celebró una misa en el templo de las Angustias, hermandad que ha organziado la visita, en la que se consagró el Sagrado Corazón de María.
Pero el momento central del día llegó con la procesión solemne por las calles de la localidad, en la que la imagen estuvo acompañada por todas las hermandades de Gloria y Penintencia de Ayamonte. En la parroquia de San Vicente de Paúl se unió al cortejo el obispo de Huelva, José Vilaplana encargado de presidir la eucaristía en el campo de fútbol Ciudad de Ayamonte, con capacidad para 7.000 personas.
La jornada transcurrió sin incedentes y hasta Ayamonte se acercaron muchos portugueses pero también sevillanos, madrileños y veraneantes extranjeros de países como Inglaterra y Holanda, que combinaron sus días de sol y playa en la Costa de la Luz con esta jornada de fervor religioso.
El presidente de la Hermandad de las Angustias, Sebastián Rodríguez, decía emocionado que hasta que no vio a la Virgen llegar al pueblo a bordo del transbordador Virgen de los Milagros no se lo creía. Han sido meses de preparativos para lograr que la Virgen de Fátima Peregrina, la segunda de las ocho tallas peregrinas de esta advocación que existen en el mundo, volviera a pisar el suelo de Ayamonte 60 años después de su anterior visita.
Rodríguez destacó la emotiva despedida que los portugueses brindaron la noche del viernes a su Virgen, que lleva dos años de peregrinación por la comarca del Algarve, así como la "fabulosa" acogida que ha tenido en la localidad onubense.
Ante la afluencia de personas, el Ayuntamiento habilitó nuevas bolsas de aparcamiento -donde los coches portugueses predominaban-, planes especiales de tráfico y señalización complementaria, además de un dispositivo sanitario de refuerzo, si bien ni la noche del viernes ni ayer no produjeron incidentes destacables.
La Virgen de Fátima Peregrina se despedirá hoy de Ayamonte tras una misa dirigida a los enfermos que presidirá el obispo emérito de Huelva.
