Los municipios sevillanos del entorno de Doñana -Aznalcázar, Pilas y Villamanrique de la Condesa- no se resisten a favorecerse de los beneficios que les puede suponer contar con el servicio de la red de Cercanías y que el C-5, la línea que enlaza los pueblos del Aljarafe Norte con Sevilla capital, se extienda hasta la estación de tren que ya existe entre Aznalcázar y Pilas y que podría beneficiar a los 20.000 vecinos de estas dos localidades y de Villamanrique de la Condesa.
Para lograr que esta línea entre en la comarca de Doñana el Ayuntamiento de Aznalcázar ya ha tomado la iniciativa y se ha dirigido por escrito a la ministra de Fomento, Ana Pastor, y al consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, José Juan Díaz Trillo, para solicitarles la línea C-5.
La primera teniente de alcalde y edil de Urbanismo, Manuela Cabello, explica que es la primera vez que ha remitido una carta con esta petición tanto al Gobierno central como a la Junta de Andalucía, pero recuerda que en el Plan de Ordenación de la Aglomeración Urbana de Sevilla (Potaus), presentaron una alegación en la que se demandaba el Cercanías. Además, señala que con el anterior Gobierno central ya mantuvieron contactos verbales con responsables de Fomento, "pero por escrito es la primera vez que nos hemos dirigido a estas dos administraciones".
Cabello afirma que la ampliación de la línea que conecta Sevilla con la comarca de Doñana no requeriría un presupuesto muy elevado porque las infraestructuras ya están hechas y se cuenta con una estación que está ubicada entre Aznalcázar y Pilas, "sólo se necesitaría que lo que ya está hecho se modernice". El Consistorio de Aznalcázar remitió las dos misivas el pasado 27 de enero y tanto la concejal como la alcaldesa, Dolores Escalona, esperan y desean recibir pronto buenas noticias.
En los escritos exponen que en la aprobación del II Plan de Desarrollo Sostenible de Doñana y el Programa Operativo Horizonte 2011 se establece como orientación estratégica en el área de comunicación, movilidad y accesibilidad, "el potenciar el transporte público colectivo, especialmente el uso de los transportes menos contaminantes como el ferrocarril". Y es que el plan dice claramente que "en la gestión de movilidad general (por motivos diversos, donde predomina la ligada al trabajo, a estudios y a motivos profesionales) y en determinados flujos recreativos (fines de semana) se deben estudiar soluciones de transporte público colectivo que aporten buenos niveles de accesibilidad y calidad de servicio para que resulten especialmente atractivos y representen una alternativa disuasoria real al uso del vehículo privado para determinados viajes. En este sentido, se deben analizar con detalle las condiciones de gestión en las que pueden ser mejoradas las ofertas de servicios de ferrocarril existente para que se eleven significativamente sus niveles para determinados tráficos".
Por ello el plan, según se expone en las dos cartas, prevé una actuación para el refuerzo de las estructuras territoriales consistente en la "implantación de servicios ferroviarios de Cercanías, con una prioridad alta".
Asimismo, se recuerda que lo que se busca es contribuir a una mayor participación del transporte público en la movilidad del entorno de Doñana, estableciendo nuevos servicios de la línea en Aznalcázar e incluso potenciando la estación de La Palma del Condado (Huelva) "para que canalicen una parte significativa del flujo de excursionistas a Doñana".
Para Escalona lograr que el Cercanías llegue hasta su municipio cumpliría dos objetivos: ofrecer un mejor transporte público a los vecinos y favorecer el acceso a Doñana sin necesidad de usar el transporte privado.
Los datos objetivos para ampliar el C-5 avalan la reclamación, puesto que esta línea, en el tiempo que lleva en servicio -hasta marzo no cumplirá su primer año de vida-, cuenta con una media de cerca de 2.400 pasajeros por día, con una tendencia al alza y estaría cerca de convertirse en la segunda línea con más pasajeros de la provincia, sólo superada por la consolidada C-1 (Lora del Río-Sevilla-Utrera-Lebrija), que cuenta con aproximadamente seis millones de usuarios al año.
