Beñat y Jesús Navas son sin lugar a dudas dos de las piezas claves en sus respectivos equipos. Ayer regresaron juntos a Sevilla después de cruzar dos veces el charco en apenas dos días para jugar un amistoso con la selección española en Panamá y se desearon suerte de cara al derbi antes de que sus caminos se bifurcaran hasta el domingo.
Beñat fue la estrella del último derbi al marcar los dos goles de falta que le dieron el triunfo al Betis, mientras que Navas es la gran pesadilla de Pepe Mel, que seguramente le dedicará un marcaje especial porque el palaciego es el que genera “el 80% del fútbol de ataque” de los nervionenses, según ha señalado el técnico heliopolitano.
Lo cierto es que el juego de Navas está recibiendo muchos parabienes en este arranque liguero, aunque luego eso no se corresponda con los números que está firmando, justo el caso contrario que le ocurre a Beñat, que parece fuera de su mejor forma pero está logrando unos guarismos más que aceptables, pues ya ha marcados dos goles y dado cuatro asistencias de gol –las mismas que su compñaero Juan Carlos–, apartado éste en el que sólo es superado en la Liga por Cesc (7) y el zaragocista Víctor Rodríguez (5). Navas, mientras, no se ha estrenado todavía.
Tapar la banda derecha del Sevilla y preocuparse por no cometer faltas cerca de la frontral –o en el lateral, como en Getafe– seguro que serán dos de las consignas más repetidas por Mel y Míchel estos días, sabedores ambos técnicos de que por ahí Navas y Beñat le pueden hacer mucho daño a sus equipos. Son dos de las figuras sobre las que girara el derbi del domingo, de eso no cabe la menor duda.
