El vicepresidente del Betis, José Antonio Bosch, realizó ayer una gira por las emisoras sevillanas para mandar un mensaje de tranquilidad sobre el futuro de la entidad a corto plazo, de aquí a junio, y zanjar de una vez por todas el rumor sobre la actitud de la plantilla ante los nuevos dirigentes. "La estupidez es libre. Nos pasamos el día oyendo infundios, pero desde el principio dijimos que los compromisos lícitos que los jugadores tuviesen pactados se cumplirían. Los jugadores cobran con regularidad todo lo que tienen pactado", dijo el consejero, que aseguró que los cuatro millones que necesita el club de aquí al final de la temporada "no son insalvables". "A día de hoy, ninguna empresa que no sea pública tiene liquidez para garantizar la nómina de marzo. Nosotros, de todas formas, llegaremos a junio, a julio y a cien años más", aseguró Bosch, que reveló que el Betis perdió 9 millones de euros en los cinco meses de mandato de Luis Oliver. "Es un dato contable", concretó.
El Betis, además, anda estos días renegociando el contrato con RBB. "Nuestro objetivo es multiplicar los ingresos por tres o cuatro. La marca se vende sola, pero está mal explotada", explicó el vicepresidente.
