Este fin de semana he vuelto a las andadas de los empachos televisivos, y de qué manera. Baloncesto, automovilismo, tenis... y mucho fútbol. Aparte de los del viernes y sábado de la Liga Adelante de primera hora, los del aperitivo del sábado de la liga inglesa, uno anterior del Schalke de Raúl, el viernes de la Bundesliga, llegamos al maratón de la tarde del sábado hasta la noche del domingo. Vuelvo a pecar y tendré que arrepentirme como dije la pasada temporada de estas agotadoras jornadas deportivas-futbolísticas. Mal empiezo, pero qué se le va a hacer.
Incontestable. El Real Betis Balompié volvió a encandilar a los aficionados verdiblancos con su victoria incontestable en el feudo del Elche. El equipo dirigido por Mel mostró una notable solvencia en todos los lances del partido. Supo defender bien, con gran autoridad, jugar con sentido en el mediocampo y aparecer sus bandas, así como Emana y Rubén Castro, en los momentos clave del partido. Este es un concepto de equipo y todavía más si gana como viene haciendo el equipo bético a las órdenes de Mel.
Beñat en el punto de mira. Ganando se fortalecen los principios, se aumentan los conceptos futbolísticos y se trabaja más a gusto aun con las dificultades que tiene la sociedad. De nuevo Beñat. Hablan de contrato, dicen que si el Athletic, y el joven cada vez que sale muestra su magnífico repertorio. Ya saben que en fútbol hay muchas personas interesadas en favorecerse de forma inmediata dejando la prudencia y la paciencia a un lado, cuando lo mejor sería dejar que las aguas (Beñat) siguieran por su cauce.
Otro tropiezo casero. De nuevo las piedras se le cruzaron en el camino al Sevilla en su estadio. Como el Deportivo serán muchos los equipos que le jueguen en su casa a los sevillistas. Postes y ocasiones siempre son motivos para aferrarse a ellas como excusas, pero el equipo muestra claras carencias, sobre todo en el mediocampo, junto a virtudes como bandas excelentes y con capacidad de producir pases y centros que por un motivo u otro, ni Negredo, ni Kanouté ni Luis Fabiano convirtieron. Antes del partido del Sevilla estuve viendo a Borja Valero con el Villarreal y, aunque a posteriori pueda parecer fácil el comentario, qué bien le hubiera venido ese jugador al Sevilla de Antonio Álvarez.
