Los armadores vascos con barcos atuneros faenando en el océano Índico para garantizar su seguridad tendrán que pagarse su propia seguridad privada. Así de claro lo dijo ayer la ministra de Defensa, Carme Chacón, en el Congreso de los Diputados.Chacón instó a la flota que faena frente a Somalia a que contrate seguridad privada y descartó, de nuevo, embarcar militares en los pesqueros. Además ayer aportó un nuevo dato, bastante contundente: la misión desplegada para dar seguridad a "empresas privadas haciendo negocios privados" cuesta 75 millones anuales a los contribuyentes españoles.
Así lo puso de manifiesto la titular de Defensa en el Congreso durante una interpelación presentada por el PNV, que reclamó al Gobierno que impulse medidas para proteger la seguridad de la flota atunera que faena en el Índico, en aguas de Somalia.
La ministra defendió las medidas puestas en marcha por el Gobierno y destacó entre ellas la autorización para contratar servicios de seguridad privada y el uso de fusiles de largo alcance.
Chacón descartó embarcar militares en los pesqueros, porque "no es posible en el ordenamiento jurídico español", y pidió a los atuneros que apliquen medidas de autoprotección, como la contratación de seguridad privada a bordo. En este sentido recordó que el Ministerio del Interior ha ido más allá y ha incluido, dentro de la ley de seguridad privada, el uso de fusiles de largo alcance en los pesqueros. Así, la ministra consideró necesario que "los atuneros del Índico hagan su aportación".
Chacón, en un balance de medidas aplicadas por el Gobierno, subrayó que dentro de la operación Atalanta de la Unión Europea (UE), España ha desplegado cuatro buques de la Armada, siete helicópteros y un avión de vigilancia marítima P3-Orion. También se han aplicado medidas y desplegado recursos en el marco de la OTAN, con la fragata Blas de Lezo, así como otras iniciativas específicas, según recordó la ministra.
Ésta manifestó que es voluntad del Gobierno mantenerse en la operación Atalanta, que se prorrogará un año más, durante la cual han sido detenidos 68 piratas, reducido los ataques que acaban en secuestro y entregados 277.000 toneladas de alimentos.
Chacón garantizó que la fragata Canarias y el avión P3-Orión se mantendrán en la zona protegiendo a los atuneros españoles hasta que acaben su temporada de pesca.
Críticas. Por su parte, el diputado del PNV, José Ramón Beloki, en la defensa de la interpelación, calificó de insuficientes las medidas puestas por el Gobierno para proteger la seguridad de la flota atunera que faena en aguas del Índico, formada por 15 barcos y 1.500 personas.El diputado vasco auguró un empeoramiento de la situación "si no hacemos nada", porque ahora acaba la temporada de los monzones, lo que animará a los piratas a seguir intentando secuestros.Beloki afirmó, asimismo, que la operación Atalanta no resuelve el problema y ha pedido "tomar medidas ya".
De forma similar se posicionó el parlamentario del PNV Unai Rementería, tras la reunión mantenida entre el Ministerio de Defensa y Medio Marino del Gobierno central y el Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Agricultura y Pesca del Gobierno vasco. Éste denunció que "el Gobierno vasco "se ha plegado a las decisiones adoptadas por el Gobierno central y ha dejado de lado las reivindicaciones del sector pesquero vasco".En este sentido, solicitó al Gobierno vasco que "tome cartas en el asunto, con rigor y en aras a ofrecer una seguridad real y efectiva a nuestros atuneros en las costas de Somalia".Rementeria denunció la "falta de voluntad política" tanto del Gobierno central como del vasco. "Más delito tiene, si cabe, la inacción del Gobierno vasco al no hacer suyas las peticiones de seguridad del sector pesquero vasco", añadió el parlamentario peneuvista.
