Hay "conversaciones incipientes y multilaterales". Manuel Chaves desveló ayer que las cajas andaluzas están dando pasos hacia una "gran caja". Lo dijo en el Foro Cinco Días, en el que negó que se pueda hablar de crisis económica y mostró su confianza en las perspectivas andaluzas.
"Creo que conversaciones hay", respondió el jefe del Ejecutivo cuando se le preguntó por la fusión de las cajas andaluzas, una vez que ya ha culminado la unión de El Monte y San Fernando en Cajasol. En presencia de presidentes de entidades y de una nutrida representación de empresarios, Chaves insistió en que, tras la "experiencia anterior", tienen que ser "única y exclusivamente" los responsables de las cajas quienes decidan cómo han de hacerse eventuales fusiones. En cualquier caso, sí aseguró que "las conversaciones acaban de comenzar" y que se producen "en muchos sentidos".
Al hablar de fusiones, el Gobierno andaluz no se refiere a una caja única andaluza. En diciembre pasado, su consejero de Economía y Hacienda, José Antonio Griñán, ya dejó claro que la Junta no incluye en esas cábalas a Cajasur (la entidad de la Iglesia) y que la recién creada Cajasol debe aún consolidarse. La Junta miraría al oriente andaluz y a posibles alianzas entre Caja Granada, Caja Jaén y Unicaja aunque, según aclararon fuentes del Gobierno andaluz, hasta que no pasen las elecciones se esperan pocos resultados de las conversaciones.
La cercanía de los comicios es también la causa, a juicio de Chaves, de la inquietud que se ha generado por la marcha de la economía. Cualquier aproximación "honesta" a su marcha, según Chaves, no conduce a pensar que hay una "situación dramática". "Un poquito de rigor", pidió Chaves, que recurrió a las cifras para intentar demostrar que son las elecciones las que alientan el catastrofismo. Según relató, en 2000-2004 España experimentó un crecimiento del 2,9% y tuvo una inflación del 4,2%. "Nadie habló de crisis", añadió, mientras que ahora el crecimiento es del 3,8%. Aventuró que en Andalucía será algo superior.
Y es que, para Chaves, aunque las "turbulencias internacionales" hacen que el momento sea "complicado", no puede hablarse "de crisis ni de recesión". Es previsible que se frene el ritmo de crecimiento, pero confió en que se va a seguir creando empleo. "Es negativo crear alarmismo porque se puede perder confianza", advirtió el presidente de la Junta que consideró que quienes anuncian catástrofes económicas tienen "cierto interés en crear la imagen de una situación de crisis" cuando hay informes que apuntan en otra dirección. Citó la encuesta Perspectivas 2008 elaborada por las Cámaras de Comercio, según la cual los empresarios andaluces afrontan este año con un optimismo superior a los españoles y europeos. "No debe haber lugar para el triunfalismo, pero tampoco por el pesimismo", sostuvo.
En un escenario de ajuste de la construcción, la pregunta de uno de los asistentes invitó a Chaves a ser más nacionalista a la hora de tratar a los constructores andaluces, primándoles en las adjudicaciones de obras públicas. "Les apoyamos para que ganen en calidad, competitividad y eficacia", zanjó.
