Investigadores del Departamento de Teoría de la Señal y Comunicaciones de la E.T.S. de Ingenieros de la Universidad de Sevilla están implementando un 'software' destinado al diagnóstico, seguimiento y control de lesiones de piel, centrándose sobre todo en lunares y melanomas que pueden derivar en cáncer de piel.
Este pionero programa informático, englobado en las denominadas herramientas CAD (Computer Aided Diagnosis) de procesado de imágenes para ayuda al diagnóstico, ya ha sido comprobado con excelentes resultados, a través de una colaboración con los servicios de Cirugía y Dermatología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.
Para la profesora de la Universidad de Sevilla y una de las responsables del proyecto, María del Carmen Serrano, esta herramienta es pionera "porque basa su diagnóstico en la textura del lunar, algo inusual hasta ahora". Además, uno de los objetivos incide en el seguimiento, ya que el software "se complementará con una base de datos individual de las imágenes tomadas en las diferentes consultas, a fin de vigilar la evolución de las lesiones de cada paciente".
La interactividad del programa informático que están desarrollando los ingenieros de la Universidad de Sevilla permitirá un uso sencillo e intuitivo del sistema. Por tanto, está destinado no sólo a los especialistas en Dermatología, sino que puede ser utilizado en los centros de salud por cualquier médico de atención primaria.
La principal aportación de esta herramienta de diagnóstico ha sido también el mayor hándicap. Esto se deriva de que la principal dificultad para los investigadores ha consistido en definir los algoritmos necesarios para caracterizar la textura de las lesiones, ya que la técnica más afianzada es la regla ABCD (Asimetría, Bordes, Color y Diámetro). Por ello, no existían trabajos aplicados al método clínico desarrollado por los ingenieros de la Universidad de Sevilla.
Las imágenes utilizadas parten de dermoscopias, que permiten visualizar capas más internas de la piel. A partir de estas imágenes, el médico está capacitado para comprobar la malignidad de un lunar y proponer el tratamiento más adecuado.
Este grupo de la Escuela de Ingenieros posee una experiencia dilatada en el tratamiento digital de imagen para el diagnóstico automático de lesiones de piel. En concreto, iniciaron su trabajo con imágenes de piel afectada por quemaduras.
