El revuelo causado por las protestas que los taxistas de Sevilla llevaron a cabo el pasado otoño sigue dando que hablar. La polémica ha saltado de las calles hasta Internet, donde los sevillanos por un lado, y un grupo de taxistas por otro, han comenzado una lucha con insultos y amenazas por medio. Facebook y un foro de taxistas han sido los canales en los que, cada uno por su parte, intenta expresar su postura.
Lo cierto es que todo empezó como una broma entre amigos. Hartos de las protestas de los taxistas en Sevilla que colapsaron la ciudad los días 20 de noviembre, y 4 y 21 de diciembre, decidieron unirse en la red social Facebook bajo el nombre "Hasta los huevos de las protestas de taxis en Sevilla ". En apenas un mes, el grupo ha superado los 500 usuarios, que "se unen de forma libre" según explica Ramón, nick de uno de los miembros, que prefiere mantener su verdadera identidad en el anonimato debido a las "graves amenazas sufridas". Y son estas amenazas lo que ha llevado a los representantes del grupo a denunciar los hechos.
Según explica Ramón, un grupo de taxistas miembros del Foro Sevilla Taxi los han insultado, amenazado e incluso "han publicado una lista con todos los nombres y apellidos de los miembros del grupo -en el que había menores- amenazándonos con llamar a nuestras casas a las 4 de la mañana".
Por ello, asegura sentir miedo. Asevera que le han mandado mensajes en los que "me aconsejan que me compre un búnker y que me haga la cirugía estética porque me tienen identificado y localizado". Unas amenazas que ya han sido borradas del panel general del Foro Sevilla Taxi , ya que éste fue cerrado por unas horas ante los insultos que había publicados en él.
Por su parte, el grupo de taxistas pertenecientes a este foro -que no aglutina al sector, sino sólo a una parte del mismo- asegura en un comunicado que "respetan la libertad de expresión de cada ciudadano, pero no las maneras de acusar al gremio por completo de mafiosos, ladrones, extorsionistas y sinvergüenzas".
Según la plataforma, estos grupos "antitaxistas" no tienen un fin crítico, "sino devaluar el trabajo de 2.300 familias, llenarlas de acusaciones falsas e instar al boicot de este servicio público".
Sin problemas con el taxi. Sin embargo, las opiniones son totalmente contrarias, ya que desde el grupo de Facebook atestiguan no tener nada en contra del taxi. "Tengo muchos amigos taxistas, y por supuesto que el foro sólo representa una pequeña parte de todo el gremio".
Por ello, incide, "el grupo no va contra el sector del taxi, sino contra su forma de protestar bloqueando la ciudad, y contra todos aquellos que insultan, amenazan, coaccionan y cohartan la libertad de expresión" explica Ramón. Además, tampoco están en contra de las manifestaciones. "Todos hemos salido a la calle alguna vez para protestar por alguna razón, para presionar y conseguir algo que considerábamos justos. Pero esas manifestaciones se hacen para protestar, no para bloquear toda la ciudad".
Los taxistas estudian denunciar el caso. La situación ha llegado también a manos de la Unión Sevillana del Taxi y a Solidaridad Hispalense del Taxi. Así, Jesús García, directivo de la Unión Sevillana del Taxi, asegura "respetar la plataforma de Facebook, pero en ningún caso toleramos los insultos, ya que éstos no tienen cabida bajo ninguna circunstancia". Por este motivo, según García, los abogados de la Asociación se encuentran estudiando el caso para ver qué se puede hacer al respecto. Igualmente, se plantean presentar una queja a Facebook para que el grupo sea eliminado.
Una postura completamente contraria ha adoptado Solidaridad Hispalense del Taxi. Su secretario, Miguel Ángel Vázquez, asevera que no van a emprender ningún tipo de acciones. No se sienten ofendidos porque, según explica, "no le dedico ni un segundo de mi atención". "Hoy nos ha tocado a nosotros y mañana le puede tocar a otro sector -continúa- pero sólo queremos que nos respeten y nos dejen hacer nuestro trabajo".
"Esto nos da más fuerza". La polémica surgida ha llevado a muchos de los miembros del grupo de Facebook a abandonarlo. Sin embargo, otros muchos aseguran que todas las coacciones que están sufriendo les "dan más fuerza y ganas para denunciar la situación".
Es el caso de Eva Rosell, quien aún se pregunta qué delito comete por pertenecer al grupo. "Formo parte de éste, pero también de otros 300. Aquí no insultamos a nadie, sólo compartimos experiencias, nos expresamos libremente, y seguiré haciéndolo porque nadie puede negarme ese derecho". De hecho, según dice, si se detecta algún insulto se elimina inmediatamente "porque no es la filosofía del grupo".
Al igual que otros miembros, Eva explica que se vio "secuestrada" en los atascos que se originaron a raíz de las huelgas de los taxistas el pasado otoño, y esto le llevó a unirse al grupo. "Yo no estoy en contra del sector, me parece genial que reclamen lo que quieran, y todo lo que consigan para mejorar su situación bienvenido sea, pero sí estoy en total desacuerdo con que colapsen toda una ciudad. Una cosa es ocupar zonas concretas de Sevilla y otra muy diferente bloquear avenidas importantes durante varias horas". Al igual que otros compañeros, Eva también ha recibido insultos y se ha sentido coaccionada por los taxistas para que abandone el foro, "pero quiero que entiendan mi derecho como ciudadana de expresarme libremente".
