The Immigrant (* * *) Sección Oficial. Francia-USA, 2013. Director:James Gray. Intérpretes:Marion Cotillard, Joaquin Phoenix, Jeremy Renner, Dagmara Dominczyk.
Juan José Roldán
El director norteamericano James Gray, que habitualmente trabaja al margen de Hollywood, es muy apreciado en Francia. Su primera película, Little Odessa, fue premiada en Deauville, mientras todas las demás han estado en la sección oficial de Cannes, y La noche es nuestra y Two Lovers estuvieron nominadas en los César. Por eso no extraña que su último trabajo haya sido coproducido por el país vecino. La inmigrante es su primera película de eso que antes llamábamos de época; precisamente Nino Rota llamó al tema musical que presentaba a Vito Corleone (De Niro) en El padrino 2ª parte con este mismo título, y por su parte Gray se revela anclado en los parámetros estéticos que inauguraba aquella obra maestra de Coppola y que a partir de entonces se convirtieron en imprescindibles para retratar ese Nueva York de principios del siglo XX poblado de inmigrantes y desplazados europeos que superaban el terrible filtro de la Isla de Ellis.
Esa puerta al Nuevo Mundo igual podía convertirlos en gánsters, prostitutas o ciudadanos respetables. Al personaje de Marion Cotillard le ocurre lo segundo, como aún hoy les sucede a muchas mujeres que llegan a la Unión Europea en busca de oportunidades. Gray tizna esta tragedia de una melancolía y un pesimismo exacerbantes, mientras define al personaje principal como una mujer por un lado decidida y por otro víctimista. Los policías corruptos de La noche es nuestra, los gánsters de La otra cara del crimen y los indecisos amantes de Two Lovers se dan cita y se mezclan en esta crónica triste de una época que encuentra su reflejo en la realidad más inmediata. Con ésta son cuatro las películas de Gray protagonizadas por Joaquin Phoenix, que en esta ocasión borda su papel. Darius Khondji firma una oscura y tenebrista fotografía, mientras Chris Spelman debuta en la composición musical con un trabajo exquisito y sensible deudor del estilo de Wojciech Kilar.
Michael Kohlhaas (*) Sección Oficial. Francia-Alemania, 2013. Director:Arnaud des Pallières. Intérpretes:Mads Mikkelsen, Mélusine Mayance, Delphine Chuillot, Bruno Ganz. Justicia para todos los gustos
J. J. R.
La leyenda del comeciante Hans Kohlhase dio pie a una revolucionaria novela de Heinrich von Kleist que llegó a dejar una huella indeleble en Kafka y en E. L. Doctorow, quien utilizó un argumento similar en una de las tramas de su celebrada novela Ragtime. En 1969 Volker Schlöndorff llevó la novela al cine con más o menos fidelidad, ambiente en Alemania y Martín Lutero entre sus personajes; David Warner era el protagonista. Tanto aquélla como esta película estuvieron en Cannes, pero des Palllières ha preferido ambientar su cinta en Francia y cambiar algunos personajes.
El argumento trata de una fanática búsqueda de justicia y retrata lo que hoy podríamos considerar un terrorista. Lástima que todo lo moderna que la novela se consideró en el siglo XVI devenga en esta adaptación cinematográfica en todo lo contrario: cine rancio, trasnochado, sin emoción ni garra, mal rodado y peor dialogado (atención en este sentido al ridículo parlamento de Bruno Ganz); tedioso de principio a fin, con una fotografía oscura y secuencias de acción sonrojantes. En el fondo nos habla de la salvaguarda del honor sin importar las consecuencias, de las imperfecciones de la justicia humana y de la redención a través de ella, siguiendo siempre parámetros anticuados. Por cierto, ¿qué pinta aquí Sergi López montado en un burro y hablando en catalán?
La bataille de solferino (* * *) Las Nuevas Olas. Francia, 2013. Director: Justine Triet. Intérpretes: Laetitia Dosch, Vincent Macaigne, Arthur Harari,Virgil Vernier. José Serrano Rodríguez
Presentada en la sección ACID del Festival de Cannes de este año, La bataille de solferino es una alocada comedia urbana que mezcla ficción cinematográfica con realidad social en un arriesgado producto de curiosos resultados. La acción tiene lugar el día 6 de mayo de 2012, domingo de elecciones presidenciales en la vecina Francia. Laetitia es madre de dos niñas pequeñas y mientras se arregla para cubrir el evento aparece en su apartamento suverborreico exmarido con una orden judicial para poder ver a sus hijas. Conseguir realizar con éxito su trabajo y que su marido no tenga acceso a las niñas se convertirá en el reto que deberá superar en tan complicado día. El desarrollo de gran parte de la película juega por tanto con el conflicto personal de la pareja y el que al mismo tiempo sucede en las calles de la ciudad parisina con el fervor de las y los seguidores de François Hollande y Nicolás Sarkoz.
La película es la representación del estado anímico de un país que se debate en dos posiciones de difícil reconciliación. Para la realizadora es una utopía alcanzarla en el plano público como así lo demuestran las secuencias con los argumentos expuestos por seguidores de uno y otro bando, mientras para el plano personal aporta soluciones más progresistas ya que ve posibilidades de entendimiento si se ejercita y se realiza un esfuerzo que prioriza el diálogo y la mediación.
Soldate Jeannette (* * *) Las Nuevas Olas. Austria, 2013. Director:Daniel Hoesl. Intérpretes:Johanna Orsini-Rosenberg, Christina Reichsthaler, Josef Kleindienst, Aurelia Burckhardt. Las vísceras, las personas y la felicidad
J.S. R.
Daniel Hoesl es un realizador austriaco bastante conocido en su país por trabajar y romper cierto tipo de reglas en el mundo del arte. Funda A European Film Conspiracy, una especie de cooperativa de profesionales que tiene como objetivo producir películas de forma colectiva y sin presupuesto. De esta curiosa forma de producir y realizar películas surge Soldate Jeannette. Protagonizado por Fanni, una mujer madura desencantada. Ella es una señora que reside sola en una casa con todo tipo de comodidades y que dedica su tiempo libre a comprarse ropa cara que tras pagarla tira al contenedor de basura. También se entretiene practicando taekwondo, robando en grandes almacenes o desfalcando grandes cantidades de dinero a las entidades con las que colabora.
Ha perdido la ilusión por vivir. Un día se echa al campo. En ese momento decide desprenderse de aquello que la ata: casa, lujo y dinero rompiendo de forma radical con esa vida triste y anodina. En su viaje termina trabajando en una granja de animales, lugar que le ofrece la posibilidad de encontrar la libertad que anhelaba. Planteada como una crítica al capitalismo, el personaje de Fanni se erige como la heroína necesaria de un mundo posible y diferente al renunciar a vestir el traje de una diseñadora por vivir en el campo rodeada de personas, carne y sus respectivas vísceras.
