Es la mujer andaluza del cine español. Eso sí, siempre alejada del tópico. Ana Fernández (Valencina de la Concepción, 1965) encara su madurez como actriz con un Regreso al hogar, el que supone su vuelta al teatro, de la mano de Harold Pinter; y un proyecto de cine en Andalucía que rescatará la figura de Antonio Machado.
"El espectador se va a sentar y creo que va a seguir muy bien la historia, un relato plagado de ironía y cinismo sobre cosas muy brutales, y después se planteará muchas cuestiones, se hará preguntas. No es una obra que dé respuestas, eso es lo interesante, es una texto que tiene un final muy abierto y precisamente por eso invita a la reflexión y al coloquio". Ana Fernández habla una y otra vez de su papel en Regreso al hogar, un encuentro de bruces con las tablas que la tiene atrapada hasta el 14 de marzo en el Teatro Español de Madrid.
El dramaturgo británico, recientemente fallecido, Harold Pinter, premio Nobel de Literatura, es el responsable de este texto que comparte con el popular Tristán Ulloa, un actor que, como la sevillana, ha paseado su carrera más entre cámaras que sobre un escenario.
Y es que, desde que Ana Fernández dejara al descubierto sus encantos interpretativos en Solas, la opera prima del sevillano Benito Zambrano que abrió la senda de la industria del cine en Andalucía y conmocionó al público de toda España, la actriz ha conducido con mesura pero con decisión su carrera actoral, que ahora se topa de frente con un reto teatral de primera fila. "Estoy muy contenta, muy emocionada, muy nerviosa", decía Fernández a su regreso a las tablas. Ahora insiste: "Ha sido muy lindo, está siendo muy lindo porque todavía no ha terminado el proceso".
Y así, aunque la actriz sevillana ha asegurado durante este tiempo que no quiere "pensar en nada hasta el 14 de marzo, que termine el teatro", guarda en cartera un nuevo proyecto en el cine, que ya avanzó en la pasada edición del Festival de Cine Europeo de Sevilla. Como la industria andaluza, ya se ha visto, le da suerte, Fernández se embarcará dentro de unos meses en la próxima película del realizador granadino Miguel Hermoso sobre la vida de Antonio Machado, donde está previsto que encarne a doña Guiomar, amante del poeta sevillano.
Directores. La actriz ha trabajado en la última década con maestros absolutos como José Luis Garci en Historia de un beso (2002); con Pedro Almodóvar en Hable con ella (2002); o con el propio Miguel Hermoso en Lola Flores (2007), entre otros grandes directores. Tan firme como segura. Ella misma lo confirma: "No borraría nada de mi trayectoria profesional. He tenido experiencias duras, pero no malas", apostilla la sevillana.
