Diez partidos, dos meses de competición ACB hasta cumplir con la jornada 34 el próximo 9 de mayo. Hasta entonces, sufrimiento garantizado para tres equipos: Estudiantes, Cajasol y Fuenlabrada, aunque otros tres se verán implicados casi con seguridad, ViveMenorca, Manresa y Granada. Los errores ya se pagarán muy caros.
Una primera vuelta con balance de descenso, con sólo cuatro victorias, determinó el futuro en esta liga para el Cajasol, antes de Rubén Magnano y ahora de Manel Comas. Difícilmente podría con esos parámetros escapar de la lucha encarnizada por la permanencia en la segunda parte de la competición si no mediaba una racha de triunfos importante, algo que no ha ocurrido hasta ahora. Intercalando victorias (dos seguidas máximo) y derrotas (hasta cinco consecutivas), llegan los sevillanos a la recta de las diez últimas jornadas a un solo triunfo de la segunda plaza de descenso (descartando ya a León, a dos triunfos y el average del Caja), ocupada por el Estudiantes, sin duda un mal rival, no tanto por su potencial como equipo como por su peso histórico y social.
El Cajasol tiene a favor, principalmente, que tiene mejores jugadores -que no es lo mismo que mejor equipo- con varios elementos desequilibrantes para momentos decisivos, aunque las mayores garantías las aportan Tyron Ellis y Elmer Bennett. También tiene una victoria y, de momento, hasta el partido del próximo día 29 en Madrid, el average sobre Estudiantes (86-72 en Sevilla). Ese partido aparece como una de las claves de este dramático final de liga, y dado que se juega en la cancha colegial, una carta que tienen guardada los de Perasovic. Los madrileños, que han sumado cinco de sus siete triunfos al calor de su público, disputarán así seis de los diez partidos que restan. De ellos, seis ante equipos de la parte baja, y por tanto, rivales directos (además del Cajasol, Manresa, Fuenlabrada (perdió 63-59 en la primera vuelta), Granada, ViveMenorca y Grupo Begar León.
El Cajasol, en cambio, tiene el calendario más duro, con cinco de los ocho mejores equipos de la tabla como rivales, y en los tres últimos a Tau, Unicaja y Real Madrid. Luego, dado que ante Fuenlabrada ha perdido los dos partidos, los empates (o triples empates) con los de Luis Casimiro pueden resultar letales.
