La dehesa militar de Tablada espera un uso de hace ya décadas.
El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), se ha mostrado partidario de dar "salida y solución" al conflicto de los suelos de la dehesa de Tablada, ofreciendo a los propietarios una "oportunidad mediante el diálogo" para que puedan incorporarse al desarrollo de la ciudad desde una perspectiva "sostenible". En una entrevista concedida a Europa Press, Monteseirín señaló que, partiendo de la premisa "principal y fundamental" del modelo de ciudad, en el que Tablada es "un elemento central como espacio verde", el Consistorio se encuentra dispuesto a "buscar fórmulas" para que en este caso, "como en otros muchos", el desarrollo del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), "respetando total y absolutamente tanto su espíritu como su letra, nos dé la posibilidad de seguir creando empleo en un sector que, últimamente, lo que viene sufriendo es la destrucción de puestos de trabajo".
"No estamos hablando de una compatibilidad de usos distintos a los propios de parque metropolitano equipado", aseguró Monteseirín, que en este sentido explicó que Tablada forma parte del proyecto 'Cauce Vivo' del río Guadalquivir, impulsado por él mismo y con el que se quiere demostrar que "se puede generar riqueza, empleo y desarrollo sobre los espacios protegidos desde el punto de vista medioambiental".
Ello, añadió, no tiene por qué suponer una contradicción entre la protección de determinados suelos y la rentabilidad, "siempre condicionado por el desarrollo sostenible". Así, expuso que la iniciativa recoge "con todo detalle" las posibilidades que puede haber en un suelo protegido "no sólo en Tablada, sino en las orillas del río en general", existiendo la posibilidad de un desarrollo económico basado en este tipo de elementos, por lo que, dependiendo del grado de protección, Monteseirín apuntó a posibilidades como parques, zonas deportivas, instalaciones de energía alternativa o espacios para la educación ambiental.
El primer edil hispalense recuerda que el PGOU se aprobó en una situación económica "distinta a la actual", por lo que "de lo que se trata es de aplicar como premisa irrenunciable el plan con total y absoluto respeto a su espíritu y letra pero teniendo en cuenta las actuaciones circunstancias económicas", toda vez que la principal preocupación debe ser "la creación de puestos de trabajo en todos los sectores de la producción".
Monteseirín admitió que no es un problema fácil de resolver y que las conversaciones están aún en una fase preliminar, señalando a este respecto que "necesitamos que por parte de la Junta de Andalucía se aprueben una serie de medidas de diseño que nos van a orientar por dónde debemos ir en esas conversaciones".
En cuanto a proyectos concretos para estos terrenos, tales como la creación de marismas en este espacio --la iniciativa que se ha dado en llamar 'Tablada azul'--, el regidor hispalense aseguró ver "con muchísimo interés" esta opción, si bien matizó que "es una idea que no sé si puede incorporarse al futuro de la dehesa en parte o en el todo".
Por último, el alcalde de Sevilla aseveró que no descarta el traslado del Real de la Feria a suelos de Tablada, pues aunque, indicó, "aún es pronto para pensar en esa posibilidad", sí volvió a insistir en que el emplazamiento inicialmente previsto para el nuevo recinto ferial, el Charco de la Pava, está "muy condicionado", puesto que el número de módulos que se ganan "no nos satisface para todo el ajetreo e inversión que supone ese traslado", pese a lo cual, a la espera de alguna solución "que aún no tenemos", no es una ubicación que se descarte de manera definitiva.