El Juzgado de Instrucción número 7 de Sevilla ha declarado sobreseída la causa contra el alcalde de Castilleja de la Cuesta, Manuel Benítez, que había sido denunciado por el Sindicato Profesional de Policía Municipales de España (Sppme) por malversación de caudales públicos, al considerar que el regidor había utilizado su cargo para llenar el depósito de su vehículo particular usando vales de repostaje de combustible que sólo pueden usar los coches oficiales del Ayuntamiento. Sin embargo, el auto judicial concluye que no existen "indicios suficientes" para determinar que Benítez llegó a utilizar los vales para uso particular.
El sindicato denunció esos hechos a principios de la primavera de 2011. En su denuncia señaló que el regidor presuntamente se dedicaba a llenar el depósito de gasolina de su vehículo particular entregando como fórmula de pago vales del Ayuntamiento para el desplazamiento del personal laboral. Según informaron en su día los denunciantes, se habría puesto la matrícula de los vehículos de obras y servicios de la corporación, alternando cada vez la matricula, la marca y el modelo en los vales. Para ello, presentaron fotocopias de un vale y una factura en la que entendían que estampó su firma el alcalde.
Sin embargo, el auto, al que ha tenido acceso este periódico, indica que tras oír las declaraciones y en especial la documentación aportada, "no se entiende que existan indicios suficientes de criminalidad para continuar la tramitación de este procedimiento", por lo que ha procedido al sobreseimiento provisional de la causa abierta contra el alcalde de Castilla de la Cuesta.
Esta decisión se produce tan sólo una semana después de que este mismo juzgado de Instrucción archivara otra denuncia contra el alcalde, también emitida por el sindicato policial, en la que acusaba a Benítez de intermediar para quitar multas a sus conocidos y allegados. En el auto emitido por este juzgado sobre este caso también se estimaba que no había indicios de que el regidor hubiera resuelto recurso alguno y alegaba que su actuación se ajustaba "al procedimiento que está marcado por la ley".
El alcalde, por su parte, se ha mostrado satisfecho por la decisión del correspondiente auto, a la vez que ya ha avanzado que "se reserva las acciones judiciales" que estime oportunas "contra aquellos que durante el proceso han puesto en duda mi honorabilidad". Benítez lamentó, en esa línea, que desde el inicio del procedimiento, que se puso en marcha justo antes de las elecciones municipales celebradas en mayo de 2011, ha "venido sufriendo recriminaciones e injustos juicios paralelos, a los que se han puesto fin con la decisión que ha adoptado el juez".
Además, remarcó que ha sufrido acusaciones públicas "que han dañado mi honor como político y sobre todo como persona y sin tener en cuenta la presunción de inocencia por parte de aquellos que han querido mancillar mi nombre". "Hay algunos que no soportan que haya sido elegido democráticamente en las urnas y sea querido por la mayoría de los ciudadanos de Castilleja de la Cuesta", añadió.
Frente a esas críticas, Benítez reiteró que siempre ha actuado "de forma correcta, buscando lo mejor para los vecinos en los más de 28 años" que lleva en la vida pública", y por ello, las dos denuncias recibidas, por las que llegó a ser imputado, le han provocado "un daño moral irreparable", sobre todo en su entorno familiar.
En ese sentido, señaló que de esa campaña "de desprestigio" hacia su persona -en la que se contabilizan críticas durante la celebración de los plenos y octavillas acusatorias por las calles- lamentó sobre todo el dolor sufrido por su familia y, en especial, de sus dos hijas, "que han llorado por esta injusticia". De todos modos, una vez que se ha resuelto esa última causa, también ha querido agradecer las "innumerables muestras de apoyo recibidas por los vecinos en este tiempo en contra de los detractores".
