La Gran Sevilla superará en 2015 el millón y medio de habitantes -ahora tiene 113.000 vecinos menos-, una proyección de población en la que destaca el aumento en el Aljarafe central y la confirmación de la parálisis de la capital, que apenas crecerá.
Aunque la ciudad de la Gran Sevilla que en números absolutos aumentará más su padrón será Dos Hermanas -20.500 nuevos vecinos,-, el salto se notará más en las localidades aljarafeñas, que dejarán de ser pueblos relativamente pequeños: la densidad de población (número de habitantes por kilómetro cuadrado) saltará de 395 a 712 en Espartinas en siete años, o de 397 a 539 en Palomares del Río. Otra localidad en la que se apiñarán más o menos el doble de vecinos en el mismo espacio es Bormujos.
Esta proyección de crecimiento la establece el estudio Frente al Potaus, firmado por el arquitecto Luis Recuenco y que combate con estas estimaciones lo que este catedrático de Urbanística y Ordenación del Territorio ve como el gran fallo del plan de la Junta para ordenar el caos de la Gran Sevilla: le faltan datos sobre población. Y hasta el momento, la Consejería de Vivienda, responsable de la aprobación definitiva del documento, ha rehusado pronunciarse.
Los más apretados. Fuera del Aljarafe central el salto de población será mucho más moderado hasta 2015, y sólo significativo en Dos Hermanas, mientras que en el resto de localidades metropolitanas es mucho más moderado, e incluso hay algunos pueblos que perderán población, como San Juan de Aznalfarache e Isla Mayor.
Los potenciales de crecimiento más elevado lo sitúa este informe en Salteras, Bollullos de la Mitación, Espartinas, Almensilla, Albaida del Aljarafe y, con reservas, en Aznalcázar y Sanlúcar la Mayor, todos en la comarca del Aljarafe.
A día de hoy la localidad más colapsada es Castilleja de la Cuesta -8.037 habitantes por kilómetro cuadrado-, situación que irá a peor en 2015, ya que Recuenco estima que llegarán 861 nuevos vecinos al pueblo.
Sólo por comparar, la capital, Sevilla, padece una densidad que ronda los 5.0000 habitantes por kilometro cuadrado.
Por contra, la densidad más baja (8,37 habitantes por kilómetro cuadrado) está hoy en Aznalcázar, cuyo extenso término es el que mayor porción tiene en el parque nacional de Doñana entre las localidades del entorno. Y, dadas las limitaciones de desarrollo urbanístico en ese entorno, la densidad seguirá siendo con mucho las más baja en 2015.
Por comarcas, la zona más poblada es Sevilla capital, seguida del Aljarafe (primera y segunda coronas), que pasará de 1.361 a 1.597 habitantes por kilómetro cuadrado. El área que Recuenco denomina Guadiamar -la corona más externa del Aljarafe- está todavía despoblada: 2,26 habitantes por kilómetro cuadrado.
