El Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) inauguró ayer la exposición Campamento de Artes por el Sáhara, en la que se reflexiona sobre el pueblo saharaui y el uso del arte como "arma pacífica por la defensa de los derechos humanos".
Así lo ha expuesto uno de los comisarios de la exposición, Federico Guzmán, quien explica que la muestra refleja que "el arte, la cultura y la educación son medios urgentes para difundir" lo que ocurre en el Sáhara Occidental, más aún en estos momentos "difíciles y tan tristes".
Guzmán se refiere al conflicto surgido en las últimas semanas entre Marruecos y los saharauis, que, según su experiencia, es desconocido más allá de España.
La exposición, con el título genérico Marhaba -que significa Bienvenido- estará abierta hasta el 22 de diciembre y se presenta en un campamento nómada creado por artistas en solidaridad con el pueblo saharaui.
Las jaimas levantadas en un patio del CAAC acogen actuaciones musicales, proyectos artísticos, materiales documentales y acciones solidarias para explicar las dimensiones culturales e históricas del conflicto.
El director del CAAC, Juan Antonio Álvarez Reyes, explica que con la muestra pretenden dejar patente "cómo la creación puede ser colectiva y cómo también la política y el arte están en relación, como ocurría en los años 60".
El proyecto recoge el impulso de los Encuentros Internacionales de Arte en Territorios Liberados del Sáhara Occidental, un festival experimental en el que han participado más de 150 artistas de 20 nacionalidades diferentes, constata uno de los dos comisarios.
Entre las fotografías que se exhiben se incluye una del ex presidente Felipe González en el Sáhara con una frase que, según los organizadores de la muestra, dijo entonces: "No os prometo, me comprometo ante la historia al deciros que el PSOE estará con vosotros hasta la victoria final".
Otras instantáneas son de carnés de identidad españoles de ciudadanos con nombres árabes, un cartel del PCE sobre las vacaciones de escolares saharauis en España o de ciudadanos de los campamentos de Tinduf.
En una de las jaimas, denominada de la Memoria, se trata la relación entre prácticas artísticas y derechos humanos. En la jaima de las artes, los asistentes pueden participar en la ceremonia del té o asistir a conciertos, entre otras actividades.
