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El artista Wenceslao Robles nos muestra 'El patio de mi casa, sin otro particular'

el 07 mar 2011 / 17:00 h.

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Autobús de Tussam.

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  • Actividad: Exposición
  • Fecha/Horario: Hasta el 5 de abril, lunes a sábado / Lunes a viernes de 17.30 a 21 h.; Sábado de 11 a 14 h.
  • Precio: Gratuito
  • Lugar: Galería Nuevo Arte. C/ San Vicente, 32
  • Teléfono: 954 915 668

En la obra gráfica de Wenceslao Robles (izda.) se adivina la belleza tras lo siniestro, siendo esto, en palabras de Eugenio Trías, la condición y límite de aquella, y entendiéndola en la representación de la herrumbre de los espacios paleo-industriales a lo que nos tiene acostumbrados el artista alcalareño, de los objetos cotidianos de existencia ignorada, de un contador de la luz obsoleto, por ejemplo, o acaso, de un reloj de estación parado.

Hoy, W. Robles metido a escultor nos muestra algo que, al parecer, Homero ya sabía: "El hierro por sí solo atrae al hombre". Me cuenta de sus visitas a las chatarrerías en busca de materiales, herrajes, tubos, grifos, alambres... y otros cachivaches, con los que pergeñar los ingenios, los tiestos y las macetas que componen el patio de mi casa, y no puedo evitar imaginármelo embelesarse largamente contemplando el espectáculo chatarrero. La experiencia de visitar una chatarrería, más allá de la solución barata a una necesidad práctica, supone un intenso y vicioso placer para el que sueña, a partir de los ecos que aún quedan en las cosas desechadas, con las experiencias vividas por otros.

Este proyecto escultórico de W. Robles si, en principio, se propone, sin más, como una operación de rescate de objetos vencidos con una intención meramente estética, nos predispone, tal vez sin querer, a la búsqueda de modelos sociales alternativos a la cultura de usar y tirar, como una forma, si se quiere, de despertar nuestros olvidos.

Vicente M. Pérez Guerrero

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