El Correo
El Consistorio ha puesto en marcha por segundo año una campaña de sensibilización contra la prostitución. Una medida de concienciación a la ciudadanía que precede la llegada del plan integral con el que se combatirá la explotación económica y de género a la que están sometidas muchas mujeres.
Tras la experiencia del pasado año, la Delegación de la Mujer pone en marcha con la llegada del nuevo curso una campaña contra la prostitución dirigida al público en general, con especial hincapié en sus clientes
Con un presupuesto de unos 15.000 euros, la campaña de este año pretende "sensibilizar y denunciar" a la población y a la clientela potencial de esta actividad, según la delegada de la Mujer, Dolores Rodríguez, que hizo hincapié en los mensajes contenidos en estos anuncios que ya se pueden ver por las calles de la ciudad, siendo en esta ocasión Pagar sexo es invertir en violencia, Consentir la prostitución es aceptar la esclavitud y La prostitución no es una elección. Ninguna mujer elige ser usada y abusada. Se colocarán banderolas, vallas, lonas y carteles sobre mobiliario urbano por toda la ciudad, con especial atención en aquellas zonas que concentran clubes de alterne y focos de prostitución, como Nervión y los polígonos industriales Store y Calonge, así como en los accesos a Sevilla y centros municipales. Asimismo, se hará uso de bicicletas publicitarias, se repartirán más de 4.000 postales con el lema por hoteles, bares y restaurantes de la ciudad y se emitirán cuñas publicitarias en diversos medios de comunicación. Esta campaña se pone en marcha con motivo de la celebración del día internacional contra la explotación sexual y la trata de mujeres, el 23 de septiembre.
Por su parte, Rodríguez adelantó ayer que el plan integral contra la prostitución sobre el que trabaja su departamento ya está terminado y que ahora está siendo revisado por los colectivos implicados, con la intención de que entre en funcionamiento este otoño. Estará dirigido a "las mujeres que quieran dejar la prostitución, no vamos a exigir nada a las que no quieren dejarla", apostilló la edil. El plan persigue acabar con la explotación económica y de género a la que son sometidas ayudándose de medidas como la ayuda económica y psicológica o la disuasión de clientes, entre otras.
