Local

El cardenal se lamenta de que el Estado ayuda a los poderosos y no a los débiles

Toque de atención cardenalicio a la hora de arbitrar medidas contra la crisis económica. En un carta pastoral, Carlos Amigo asegura que "en algún momento, parece como si las propuestas de solución se dirigieran más a arreglar problemas de los poderosos que a la atención a los débiles".

el 15 sep 2009 / 19:54 h.

TAGS:

Toque de atención cardenalicio a la responsabilidad de los poderes públicos a la hora de arbitrar medidas contra la crisis económica. En un carta pastoral, Carlos Amigo asegura que "en algún momento, parece como si las propuestas de solución se dirigieran más a arreglar problemas de los poderosos que a la atención a los débiles".

Propuestas cristianas ante la crisis económica es el título de la carta pastoral del cardenal Amigo con motivo de la campaña de invierno de Cáritas Diocesana, una misiva en la que el prelado sevillano aporta una serie de "recomendaciones" para afrontar este periodo de recesión que se ceba particularmente con las personas que se encuentran en "situación continuada de indigencia".

Amigo anima a los fieles a colaborar "con otras asociaciones y entidades ciudadanas en aquellas acciones sociales de solidaridad con los más afectados", si bien advierte de la responsabilidad de las administraciones en la solución de la crisis. Subraya el cardenal que el apoyo de las instituciones eclesiales con otros entes ciudadanos no debe servir "nunca como excusa para que las autoridades públicas se inhiban de la grave responsabilidad que les incumbe como primeros responsables del cuidado de los más desfavorecidos". En este sentido, el prelado sevillano critica, sin mencionarlas, algunas de las medidas anti crisis adoptadas por el Gobierno asegurando que "en algún momento, parece como si las propuestas de solución se dirigieran más a arreglar problemas de los poderosos que a la atención a los débiles", en una alocución clara al plan de rescate del sector financiero.

"No debemos olvidar que las situaciones de dificultad social y económica suelen llegar más como efecto de una conducta poco ética que por unas presuntas causas desconocidas", añade el cardenal coincidiendo con los analistas que señalan a la avaricia como uno de los orígenes de la crisis actual.

Carlos Amigo concluye su reflexión con una petición a los políticos para que "puedan encontrar, cuanto antes, los mejores caminos de solución. Pero que, en forma alguna -subraya- se recorte en los presupuestos las partidas que se han de dedicar a las ayudas sociales".

En la misiva, Amigo hace un llamamiento a todas las parroquias para que "haya una atención particular para aquellas personas que puedan estar en especial situación de dificultad". Además, pide a las comunidades de vida consagrada, asociaciones, movimientos y hermandades, "que en sus programas de acción caritativa y social hagan un esfuerzo de generosidad en estos momentos de dificultad", al tiempo que recuerda que Cáritas tiene en marcha distintos programas dedicados especialmente a personas que se encuentran en situación de indigencia.

  • 1