La Confederación Española de Comercio se mostró "totalmente contraria" a la petición del presidente de la Comisión Nacional de la Competencia, Luis Berenguer, de eliminar las leyes que limitan la libertad de establecimiento y horarios comerciales.
En una nota, aseguró que esta petición "está totalmente fuera de lugar debido a que está demostrado que el régimen de la libertad de horarios no afecta en absoluto a la competitividad, a la producción y a la inflación". Y añadió que en otros países como Alemania y Holanda, los horarios comerciales son muy restrictivos, y "tienen una inflación baja y una productividad alta".
En su opinión, no hay demanda social para poner en marcha medidas de liberalización, ni "volver a reactivar la polémica cuando la batalla de los horarios comerciales acabó con la Ley Montilla de 2004".