En el Consejo de Cofradías están que trinan con el acuerdo fraguado por los hermanos mayores del Jueves Santo, "obviando al delegado de día", para retrasar en 20 minutos los horarios en Carrera Oficial a fin de que la primera cofradía de la jornada, Los Negritos, no se encuentre la Puerta de San Miguel cerrada por la celebración de los Santos Oficios. Tanto es así que desde San Gregorio se ponen serios reparos a este plan y hasta se condiciona su ratificación a lo que tenga que decir el Cecop (Centro de Coordinación Operativa del Ayuntamiento de Sevilla) al respecto.
"Lo primero que va a hacer el Consejo es consultar a la junta superior y valorar cómo le afecta ese retraso horario del Jueves Santo a la ciudad", explica el presidente del Consejo, Adolfo Arenas, quien critica que este plan se fraguara casi a espaldas del delegado de día, Vicente Ramos, al que, según Arenas, se le pidió que no asistiera a la reunión del pasado jueves en la hermandad de Los Negritos en la que se materializó el citado acuerdo.
El presidente del Consejo defiende el inexcusable papel que debe jugar la institución en acuerdos que afectan a la estructura horaria de una jornada. "El Consejo no se va a meter en acuerdos internos entre dos hermandades. Ahora bien, en el momento en que se habla de modificar horarios, el día ya no es quien para tomar acuerdos con ánimo de permanencia por encima del Consejo".
Según argumenta Adolfo Arenas, el acuerdo del Jueves Santo es a día de hoy una mera "solicitud o propuesta" que deberá ser ratificada por la junta superior y, en última instancia, por el Cabildo de Toma de Horas. "Habrá que valorar muchas cosas que ahora mismo no alcanzamos a apreciar, como por ejemplo en qué medida afecta este retraso de 20 minutos a todos los servicios de la ciudad: a la limpieza de la Campana por Lipasam entre el final del Jueves Santo y el inicio de la Madrugá, a los relevos de la Policía Local entre ambas jornadas y hasta a cosas tan insignificantes como a la gente que se va a cenar entre Pasión y El Silencio. Supongo que el Cecop tendrá algo que decir", insiste.
Arenas lamenta "profundamente" que el delegado del Jueves Santo en el Consejo, Vicente Ramos, no fuera invitado "a una reunión en la que se trataba algo tan relevante como es la Semana Santa, porque de las cofradías en la calle el Consejo tiene mucho que decir", subraya.
Antes de que se fraguara este acuerdo, el presidente del Consejo intentó mediar ante el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, para que adelantara la celebración de los Oficios, a lo que el prelado respondió que le enviaran una solicitud por escrito. Las hermandades del Jueves Santo han expresado su malestar por que se haya hablado en su nombre y sin su conocimiento previo.
Monte-Sión no dará marcha atrás. Ni las presiones recibidas ni siquiera la convocatoria anoche, vía sms e internet, de una concentración de protesta en la casa de hermandad para pedir explicaciones a la junta sobre la anunciada permuta de puestos con la hermandad de la Exaltación, harán al hermano mayor de Monte-Sión, Rafael Buzón, reconsiderar el acuerdo alcanzado en el seno del Jueves Santo. En declaraciones a este periódico, el mandatario de la corporación de la calle Feria aseguró que la hermandad “mantendrá su postura” y lamentó la “poca clase” demostrada por algunos de su hermanos al incitar vía sms a pedir explicaciones a la junta de gobierno sobre dicho cambio. Merced a este acuerdo, La Exaltación y Monte-Sión permutarán esta Semana Santa sus lugares de paso por Carrera Oficial, pasando la cofradía de la plaza de los Carros a ser la segunda en Campana mientras que la de la Exaltación será la cuarta. Rafael Buzón defiende que las reglas de su hermandad facultan a la junta de gobierno para tomar estas decisiones y subraya la bondad de un acuerdo alcanzado “con el fin de tener una mayor fluidez y evitar la serie de parones” que su cofradía venía padeciendo de regreso a la capilla. “Al fin y al cabo, sólo se trata de una prueba y, si vemos que no resulta, el año que viene volvemos a nuestro sitio”, explica Buzón, de ahí que no entienda “la actitud de una serie de individuos” que se han dedicado a convocar a todos los hermanos a través de los teléfonos móviles. “Es un acuerdo que es por un año y que es bueno para nosostros, para la Exaltación y para el Jueves Santo en sí. No tiene más historia”, concluye.
